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El escándalo de la semana en… la Cámara de Diputados

Este miércoles 1 de julio, el mismo día que el Instituto Nacional de Estadísticas dio a conocer la cifra más alta de cesantía de la última década -10,2 por ciento para el trimestre móvil  marzo-mayo-, la Cámara de Diputados celebraba «a todo trapo» un nuevo aniversario de la Corporación. Cena bailable en la que participaron desde los legisladores hasta sus asesores y funcionarios, quienes compartieron bajo una amplia carpa que se montó en el Sporting Club de Viña del Mar. Si hacía frío no se notó, trago y bailoteo animaron la noche, en la que «hubo de todo», incluso una pelea en el estacionamiento protagonizada por un «honorable».


Este miércoles 1 de julio, el mismo día que el Instituto Nacional de Estadísticas dio a conocer la cifra más alta de cesantía de la última década -10,2 por ciento para el trimestre móvil  marzo-mayo-, la Cámara de Diputados celebraba «a todo trapo» un nuevo aniversario de la Corporación. Cena bailable en la que participaron desde los legisladores hasta sus asesores y funcionarios, quienes compartieron bajo una amplia carpa que se montó en el Sporting Club de Viña del Mar. Si hacía frío no se notó, trago y bailoteo animaron la noche, en la que «hubo de todo», incluso una pelea en el estacionamiento protagonizada por un «honorable».

 

Las señales de austeridad anunciadas el 11 de marzo, y reiteradas cada vez que es posible, por el presidente de la Corporación Rodrigo Álvarez, brillaron por su ausencia. A la hora de celebrar «que no se note pobreza» parece haber sido la premisa de los organizadores, según el relato de algunos de los asistentes a la comida que quedará, sin duda, en los anales de la Cámara de Diputados.

 

Como en cualquier fiesta de barrio o a la salida de la disco farandulera de moda, avanzada la noche un «honorable» se trenzó a golpes con el marido de su secretaria. Según el relato de varios de los presentes, el encontrón se produjo porque el diputado fue sorprendido por el esposo ofendido que «le estaba haciendo la pillá a su mujer».  Para rematar, un colega parlamentario se metió, nadie sabe explicar con qué intenciones, unos dicen que a ayudar al primero. El caso es que la dama en discordia también dejó de pertenecer al staff de la Cámara. Unos dicen que ella había renunciado días antes de la comida y otros dicen que fue despedida este jueves, cuando el efecto del exceso de comida, bailoteo y trago ya había pasado.

 

Aunque el presidente de la Cámara no se encuentra en el país, fuentes de la Corporación aseguran que ya fue puesto en conocimiento de lo sucedido.

 

 

 

 

 

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