A pesar de la cercanía con el mandatario, el alcalde se ha caracterizado por su estilo frontal ante los errores del gobierno. Fue él quien acuñó la frase que los problemas del gobierno pasaban porque a las autoridades “les hacía falta calle”, que La Moneda “se supera constantemente, pero para mal”, que las cifras de desaprobación “son penosas”, que no se escuchaba a la gente y que no había capacidad para anticiparse a los conflictos.
El segundo aniversario del gobierno de Sebastián Piñera, el pasado domingo 11 de marzo, tenía nervioso a las autoridades de La Moneda, principalmente por ciertos balances que pudieran empañar la celebración. Por ello, algunos de los rostros más “polémicos” de la Alianza recibieron un llamado al orden desde Palacio en que se les solicitó guardar estricto silencio sobre las falencias de la actual administración.
Así fue con el vicepresidente de RN, Manuel José Ossandón, a quien el viernes de la semana pasada se le pidió expresamente que no hiciera críticas a La Moneda en el marco de la conmemoración del segundo aniversario. La asesora presidencial, Fernanda Otero, llamó al díscolo alcalde de Puente Alto y le pidió que “no atacara más al gobierno”.
Ello, trascendió, por la preocupación que había en Palacio del impacto negativo que generaría un análisis descarnado como el de Ossandón, en momentos en que desde La Moneda intentan ordenar las fichas para enfrentar el segundo tiempo del gobierno de Piñera.
A pesar de la cercanía con el mandatario, el alcalde Ossandón se ha caracterizado por su estilo frontal ante los errores del gobierno. Fue él quien acuñó la frase que los problemas del gobierno pasaban porque a las autoridades “les hacía falta calle”, que La Moneda “se supera constantemente, pero para mal”, que las cifras de desaprobación “son penosas”, que no se escuchaba a la gente y que no había capacidad para anticiparse a los conflictos.
Los primeros días de marzo, de hecho, enrostró a La Moneda la “torpeza” con que se ha enfrentado las movilizaciones en Aysén e insistió que el gobierno se caracteriza porque “todas las semanas cometen un error político”.
Trascendió que la conversación tuvo momentos tensos, ya que la asesora presidencial habría hecho notar a Ossandón que ese estilo crítico podría perjudicar sus aspiraciones senatoriales, a lo que el edil refutó que no era él quien tenía altos índices de desaprobación ciudadana y falta de credibilidad.
