La razón por la que Uriarte cruzó a la oficina de la ministra Williams, es que sus declaraciones y sus efectos generaron bastante molestia en el comité político de La Moneda, por lo que fue llamada a terreno. No solo eso, se decidió y notificó a través de la jefa de gabinete de la Presidenta que será sometida a un coaching supervisado por la Secretaría de Comunicaciones (SECOM).
El viernes 16 de septiembre en la tarde, la todopoderosa jefa de gabinete de la Presidenta, Ana Lya Uriarte, cruzó desde La Moneda rumbo a las dependencias del Ministerio de Minería para reunirse con la titular de esa cartera, Aurora Williams. La cita no era pública y la ministra fue advertida solo unos minutos antes con un llamado telefónico. Es que Uriarte tenía la tarea de arreglar el desaguisado que protagonizó la secretaria de Estado esa semana y así cumplir con la nueva y estricta disciplina comunicacional establecida en Palacio.
Tres días antes, Williams participó en la cena anual de la Semana de la Bolsa de Metales de Londres, que reúne a toda la industria minera a nivel mundial, la cita más relevante del sector, a nivel empresarial y político, ya que las embajadas de los países mineros como Chile cumplen para este evento una intensa pauta de actividades.
El orador principal de la cena fue el presidente del directorio de Codelco, Óscar Landerretche, pero su discurso fue “empañado” horas antes con las declaraciones que dio en Londres la ministra Williams en las que reveló que el gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet no tenía en carpeta dar más financiamiento a Codelco: «En este momento, lo importante es que Codelco está suficientemente capitalizado año a año», declaró.
En el gobierno reconocen que las desacertadas declaraciones de Williams no solo generaron ruido innecesario en el delicado y vulnerable mercado metalúrgico, sino que además causaron una profunda molestia entre las autoridades de Codelco y del Ministerio de Hacienda, ya que la errática performance de la ministra de Minería demostró el desconocimiento que tiene de la sensibilidad de dicho mercado y el poco tino político de incentivar una sobre reacción en el sector.
Ese mismo día, en la Cámara de Diputados se realizó una sesión especial para analizar la situación de Codelco y como era de esperarse, la mayoría de los parlamentarios aludieron a las declaraciones de Williams y emplazaron al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, a aclarar el entuerto.
Afirman que de manera muy elegante, como es su estilo, Valdés “le quitó el piso” a la ministra de Minería y realizó una suerte de interpretación de sus dichos. “El gobierno siempre va a estar disponible para capitalizar Codelco de manera que sus indicadores financieros sean sanos, de manera que pueda acceder a endeudarse para poder financiar parte de estos proyectos. Estamos en proceso de revisar esos proyectos, pero en ningún caso queremos dejar de hacer proyectos que son buenos para Chile en el mediano plazo”, precisó.
La razón por la que Uriarte cruzó a la oficina de la ministra Williams, es que sus declaraciones y sus efectos generaron bastante molestia en el comité político de La Moneda, por lo que fue llamada a terreno. No solo eso, se decidió y notificó a través de la jefa de gabinete de la Presidenta que será sometida a un coaching supervisado por la Secretaría de Comunicaciones (SECOM).
Así, a Williams le realizaran “clases prácticas de comunicación” para evitar que se repita el episodio de Londres y mientras está en clases, debe mantener un bajo perfil.
