En paralelo al proceso interno que lleva el Tribunal Supremo de la DC sobre las acusaciones de violencia intrafamiliar que salieron a la luz hace unos meses contra el diputado Ricardo Rincón, la comisión de ética de la falange también debatió la situación del parlamentario y ya habría hecho llegar -reservadamente- su sentencia a la timonel del partido, Carolina Goic.
La comisión de ética de la DC tiene la tarea de velar por el resguardo de los principios que inspiran a la falange, el correcto desempeño de la actividad política y cooperar en la solución de problemas éticos en la colectividad. La conforman militantes que son “personalidades del partido” como fundadores, ex Presidentes de la República, ex timoneles, parlamentarios que hayan sido parte de las testeras del Senado o de la Cámara de Diputados, ex presidentes del Tribunal Supremo y personeros elegidos por el consejo nacional. Actualmente la integran el ex ministro Carlos Massad y el ex Superintendente de Salud, Manuel Inostroza, Marta Cruz Coke y el abogado experto en derecho penal, Alfredo Etcheverry.
En la DC trascendió que dicha comisión ya falló sobre la situación de Rincón y que su pronunciamiento ya estaría en poder de la senadora Goic, en un sobre sellado, del cual nadie en la directiva nacional tendría conocimiento de su contenido.
Sin embargo, en la falange dirigentes y parlamentarios aseguraron que algunos de los integrantes de la comisión de ética, sin entrar en detalles sobre el contenido, han dado señales que la resolución emitida cuestiona con dureza el accionar del diputado Rincón y es desfavorable a sus intereses para dejar atrás el polémico episodio. “Hicimos lo que debíamos, lo correcto”, habrían comentado miembros de la comisión.
El caso Rincón apunta a las acusaciones de violencia intrafamiliar contra una ex pareja del parlamentario, que sucedieron hace 14 años. Los defensores del diputado en la bancada y en la colectividad han tratado de bajar el perfil al asunto argumentando que los sucesos ocurrieron hace más de una década.
Pero internamente en el partido hay parlamentarios, dirigentes y militantes de base que insisten en que sin importar cuando, el PDC tiene la obligación de dar una señal pública de rechazo absoluto y sin matices a situaciones de violencia intra familiar, como en cualquier otro episodio reñido con la ética y la probidad a la que obligan los estatutos y principios de la colectividad.
El tema es una complicación no menor para Goic, quien debe evaluar la posibilidad de dejar fuera de la plantilla parlamentaria para noviembre a Rincón como una señal política. En la falange afirman que si es consecuente con el discurso público de defensa de la probidad en todos los aspectos la timonel no tendría mucho espacio de maniobra sin contravenir uno de los pilares de su gestión.
