
Los coletazos políticos del réquiem de Chadwick
por Hernán Leighton
La aprobación de la acusación contra Chadwick es una pésima noticia para La Moneda, no solo porque era una pieza clave y estratégica del piñerismo, sino además porque marca un precedente que en el Ejecutivo no gustó nada y que trataron de evitar a toda costa: ahora queda en la mira el actual ministro del Interior, Gonzalo Blumel, y además está expuesta la figura del propio Presidente. Pero tras la imagen del otrora hombre más fuerte de Palacio flanqueado por ministros y parlamentarios, había una serie de resquemores y facturas internas en el seno de Chile Vamos, entre los partidos y con el propio Gobierno. Desde la UDI consideraron tardío y forzado el despliegue ministerial para acompañar a Chadwick y, a medida que se acercaba la votación, se escucharon con mayor intensidad las críticas por un débil desempeño de La Moneda por salvar, efectivamente, al "coronel".