El ministro de Agricultura, Luis Mayol, anunció que fue decretada la Emergencia Agrícola para las regiones de Valparaíso y del Maule (Quinta y Séptima, respectivamente), debido a los daños ocasionados por las heladas caídas en las últimas semanas y que ha afectado a la producción hortofrutícola de la zona central del país.
El secretario de Estado anunció además que este miércoles sesionará el Consejo Regional (CORE) de la Región Metropolitana para evaluar la situación hortofrutícola y en base a ello decidir si corresponde solicitar que se declare la Emergencia Agrícola en la zona.
El ministro hizo este anuncio tras participar en el Consejo de Ministros en La Moneda, y acompañado de su par del Trabajo, Juan Carlos Jobet.
La Emergencia Agrícola decretada hoy se suma a la ya dispuesta el jueves último para la Región de O’Higgins.
Mayol especificó que el Gobierno dispuso un plan especial para ir en ayuda de los pequeños productores, estén o no afiliados al Instituto de Desarrollo Agropecuario (Indap).
En ese sentido, el ministro informó que el Indap se encuentra desplegado en terreno desde el 20 de septiembre, realizando un catastro muy detallado de sus 52.442 usuarios, entre las Tercera y Séptima regiones. «Se determinó cuál es el universo de los que estaban con más daños y cuáles eran esos daños», especificó.
Añadió que del total de los productores catastrados, cerca de 6 mil son los afectados, los que en su mayoría cuentan con seguros comprometidos. Mayol resaltó que quienes no cuentan con seguros se les está prestando ayuda mediante la entrega de bonos, que van de los 200 mil a los 400 mil por hectárea.
El Secretario de Estado dijo que se trata mayormente de agricultores de hortalizas, quienes ya han recibido las ayudas y han resembrado sus terrenos.
Respecto a los pequeños productores que no están cubiertos por Indap, el ministro Mayol señaló que son éstos los beneficiados directos con la declaración de estado de Emergencia Agrícola.
A manera de evaluación, el secretario de Estado dijo que actualmente hay una pérdida de alrededor del 25% de la plantación de frutales en toda la zona del valle central, estimando las pérdidas en unos U$500 millones, lo que se traduce en unas 50 millones de cajas de frutas dañadas.
Sobre una posible alza de precios, Mayol fue enfático en señalar que «el consumidor no se asuste y no crea lo que están diciendo muchos especuladores de que los precios de las hortalizas van a subir sustancialmente, ello no es así».
Por su lado, el ministro del Trabajo, Juan Carlos Jobet, se refirió al plan del gobierno para paliar los efectos negativos de las heladas en el plano laboral, definiendo cuatro puntos claves:
-Intermediación laboral: lanzar ferias laborales en las zonas más afectadas, fortalecer la bolsa nacional de empleo y disponer de planes piloto de intermediación con empresas privadas.
-Cursos de capacitación en verano.
-Bono a contratación de trabajadores: bonos equivalentes a un 40% del salario mínimo, para que productores contraten mano de obra.
-Cupos de empleo de emergencia.
Jobet comentó que «afortunadamente esta situación nos encuentra en un momento en que el desempleo está muy bajo en las regiones afectadas. En la Región de O’Higgins, que es la región con más efectos negativos, el desempleo está en 5%; en la Región Metropolitana, en 5,1%; en Maule, 6,7%.».
«Eso nos hace pensar que un porcentaje de esos empleos que no se va a generar en las industrias afectadas por las heladas pueden ser absorbidos por otras industrias o por otros cultivos», precisó.
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