El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, aseguró, en su presentación en la cumbre empresarial Enade 2013, que la administración de Sebastián Piñera dejará «un país mucho mejor» que el que recibió del gobierno de Michelle Bachelet en marzo de 2010.
«Cuidemos lo que tenemos y nuestras instituciones. En economía y en desarrollo no existen soluciones mágicas ni los atajos, existe sólo el trabajo duro y responsable. Tenemos la satisfacción de que nuestro gobierno va a dejar un país mucho mejor del que recibió», sostuvo en el evento realizado en CasaPiedra.
El titular de Hacienda destacó que, durante el gobierno del Presidente Sebastián Piñera, el país «recuperó la capacidad de crecer más que el mundo», gracias a bases de crecimiento que se sustentan en «mayor productividad, empleo e inversión». En este último punto destacó los niveles históricos de casi 27% del PIB el año pasado.
En esa línea, Larraín advirtió que «hay caminos que son equivocados para llegar al desarrollo», como el populismo. «Hay una tentación grande en pensar en tremendas políticas redistributivas, pero les quiero decir que la experiencia del populismo es una sola: siempre termina perjudicando a quienes se suponía iba a favorecer, siempre perjudica a los más pobres y a los que tienen menos».
El ministro de Hacienda sostuvo que se debe tener «ojo con aumentos de impuestos que perjudiquen a las PYMEs y a la clase media», ya que «propuestas tributarias que inhiban la inversión y el emprendimiento, generan efectos inevitables en el crecimiento y, por ende, en la creación de empleo».
Agregó que «yo no puedo sostener responsable y honestamente que una propuesta tributaria que quiera aumentar en tres puntos del PIB o más, que pretenda generar cambios institucionales profundos en nuestro país, no va a tener ningún efecto en la inversión y el crecimiento. Yo no puedo sostener eso responsablemente, ni como ministro ni como economista», sostuvo.
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