NUEVA CONSTITUCIÓN

Alondra Carrillo, Cristina Dorador y Virginia Palma Erpel: los perfiles feministas en la nueva política

Las electas constituyentes Alondra Carrillo y Cristina Dorador, además de la concejala electa por Santiago, Virginia Palma Erpel, coinciden en que espacios que se ganaron en la elección popular se deben a sus trabajos territoriales en torno a temas afines y en favor de la agenda de género en sus respectivos distritos y comunas. Así, por ejemplo, Alondra cuenta que la experiencia que la llevó a ser electa se generó en la Coordinadora Feminista 8M, donde el objetivo era «levantar nuestra propia voz en el contexto de disputa política»; la Sociedad Civil por la Acción Climática, en tanto, fue uno de los movimientos que impulsaron la candidatura de Cristina Dorador; y en el caso de Virginia Palma Erpel, resultó fundamental su trabajo de 10 años como dirigenta social, principalmente en la labor de sacar adelante proyectos de ley y acciones contra los deudores de pensión de alimentos, en favor de resguardar el derecho alimentario de los niños, niñas y jóvenes.

Las elecciones terminaron, pero la conversación sobre lo que se nos viene está más despierta que nunca. En estas elecciones, el amplio apoyo recibido por mujeres que postularon a diversos cargos hace que expertas, como la académica del Instituto de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile, María Cristina Escudero, entre otras, proyecten que realmente se pueda posicionar una agenda de género, que abogue por la igualdad de derechos y que considere las necesidades del 51% de la población, mujeres que siempre estuvieron infrarrepresentadas.

Es por ello que conversaron con El Mostrador Braga las recién electas para constituyentes, Alondra Carrillo en nombre de la Coordinadora Feminista 8M; la científica antofagastina Cristina Dorador; además de la electa como concejala, Virginia Palma Erpel.

Si bien antes de las elecciones había quienes aseguraban que “cualquiera sin estudios será constituyente”, la realidad es que, de los 155 electos y electas, 59 son abogados(as), 19 académicas(os), entre otra gran cantidad de personas con preparación universitaria.

Cristina Dorador Ortiz es una científica y doctora que realiza investigaciones en microbiología. Además, es profesora asociada del Departamento de Biotecnología de la Facultad de Ciencias del Mar y Recursos Naturales de la Universidad de Antofagasta. Uno de los principales elementos que motivaron su candidatura fue la protección de salares y ecosistemas del Altiplano y desierto de Atacama.

“Además de mi trabajo en distintas instancias de política científica y en temas de género en la investigación, fueron muchas personas y organizaciones quienes me pidieron ser parte del proceso, incluyendo el Movimiento Independientes del Norte y la Sociedad Civil por la Acción Climática”, cuenta.

En este nuevo rol, siente que representa a las y los habitantes de la Región de Antofagasta, y de esta manera quiere llevar las demandas, sentires y anhelos de la comunidad, las cuales se traducen en mayores derechos sociales, descentralización real y que se establezcan nuevas éticas respecto a la relación entre el ser humano y la naturaleza, avanzando hacia una Constitución Ecológica. “También siento que puedo contribuir a que se discutan temáticas transversales, como ciencia y conocimiento, equidad de género y territorial”, plantea.

Durante su campaña, se enfocó en cinco aspectos. En primer lugar, que la Constitución se debe basar en el respeto a los derechos humanos y que garantice la equidad social, lo que incluye el reconocimiento de derechos como la vivienda, salud, educación, pensiones dignas, vida libre de violencia, reconocimiento de niñas, niños y adolescentes como sujetos de derecho, reconocimiento a los cuidados y el trabajo no remunerado realizados mayormente por mujeres y, también, reconocer a las personas con discapacidad como sujetos de derecho.

En segundo lugar, que la Carta Fundamental sea ecológica, en donde “se reconozca el vínculo entre el ser humano y naturaleza, derivando de él derechos como los de la naturaleza, a vivir en un ambiente sano y equilibrado y derecho humano al agua y la seguridad hídrica”, señala.

La descentralización real es un aspecto vital y, puntualiza, se puede llegar a ello a través de autonomías regionales, donde sean los territorios y sus habitantes quienes decidan sus destinos y puedan tener mayor autonomía económica y política. También, el reconocimiento de los pueblos originarios y Chile como Estado Plurinacional y Pluricultural. Del mismo modo, reconocimiento de las distintas lenguas, incluyendo la lengua de señas chilena.

Finalmente, cuenta que, para ella, la nueva Carta Magna debe estar embebida de equidad, “que nadie se quede fuera, esto implica pensar el texto desde la equidad de género, territorial y de diversidad”, establece.

En muchos puntos coincide la electa como concejala, Virginia Palma Erpel, egresada de derecho y presidenta de la ONG Acción Mujer y Madre. Palma ha sido dirigenta por 10 años, principalmente en el trabajo de sacar adelante proyectos de ley y acciones contra los deudores de pensión de alimentos, en favor de resguardar el derecho alimentario de los niños, niñas y jóvenes.

Lo que la motivó a postularse fue que, tras sus años como dirigenta social, siendo también desde 2017 parte del equipo de la recientemente electa alcaldesa de Santiago, Irací Hassler, conoció a las organizaciones sociales de Santiago, “a las vecinas, vecinos, estudiantes, artesanos, artesanas, etc. Yo fui la territorial del equipo de la concejalía de Irací, además de asesorar jurídicamente en ciertas materias”, cuenta.

Además, agrega que, en lo personal, la motivó el tener la oportunidad de seguir avanzando en muchas cosas que lograron con la concejalía y estrechar aún más el trabajo de “una autoridad que está para sus vecinos y vecinas, a través del vínculo con estas y las organizaciones sociales”.

El asumir ser candidata es, para Palma, parte de la convicción de “una lucha que hemos venido dando, y esa es que se abran los espacios a las mujeres en cargos públicos de toma de decisiones, espacios políticos y de representación. ¡Había que asumir el desafío!”, expresa con entusiasmo.

Respecto a quienes desea dar voz, espera poder representar las necesidades y propuestas de todos y todas, pero sobre todo relevar las necesidades y el valor de las mujeres, madres, las mujeres mayores, migrantes, además de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes de Santiago.

Sus propuestas giran en torno a aportar a la calidad de vida de las personas, además de la dignidad, la perspectiva de género y los derechos humanos, como centro de toda decisión que se tome desde el municipio. “Mi primer gran compromiso es estar muy atenta a que estos tres factores estén presentes en cada propuesta que nazca de la nueva alcaldía, cooperar para que en esto no fallemos”, asegura. Su sueño es que en Santiago se puedan habilitar mejores y más espacios para no solo mujeres que viven violencia, sino que también para sus hijos e hijas.

Alondra Carrillo, en tanto, es una de las constituyentes electas más jóvenes. Además, es la candidatura presentada por organizaciones de la sociedad civil que más votos obtuvo (22.700). Es psicóloga clínica y estudiante de posgrado en filosofía política. También es conocida por haber sido vocera de la Coordinadora Feminista 8M (CF8M) desde 2018 hasta 2021.

Su candidatura constituyente fue parte de una decisión colectiva que tomaron en la CF8M, con el propósito de “poder levantar nuestra propia voz en el contexto de disputa política y programática que han abierto nuestros pueblos mediante la fuerza de movilización y de su lucha política”, explica.

Carrillo detalla que su rol va a ser el de una vocería constituyente del programa generado por la Coordinadora Feminista, el cual fue construido colectivamente en los encuentros plurinacionales en donde se “lucha por miles de mujeres, disidencias lesbianas, trans, travestis, no binarias”, entre otras.

Es una vocería de un proceso deliberativo, amplio y permanente que va a estar dándose al alero de la Asamblea de Organizaciones Sociales y Territoriales del Distrito 12 y que esperan que alcance a todas las personas del distrito, que tengan o puedan encontrarse con el deseo de participar en este proceso de “lucha política popular por un orden radicalmente distinto al que hemos vivido hasta este momento”, expresa.

Finalmente, acerca de sus propuestas o lineamientos, cuenta que van a la Convención Constitucional con un mandato y con una orientación que ha sido ampliamente planteada por las y los ciudadanos en el estallido social desde el 18 de octubre de 2019 en adelante, lo que porta también “las décadas de lucha para consagrar un Estado solidario, garante de derechos y plurinacional que ponga en el centro de la política la vida de mujeres, disidencias, entre otras».