BRAGA

La violación de su hija pone a una madre en la lucha electoral en la India

«La injusticia que nos pasó no debería sucederle a nadie; por eso hemos entrado en política», explica a Efe casi en un susurro Asha Singh, desde la casa de Unnao en la que vive junto con sus cinco hijos y otros familiares.

Asha Singh lucha por primera vez en su vida en unas elecciones para reclamar el honor perdido de las mujeres indias, y para que no se repita la injusticia que sufrió su familia con la violación en 2017 de una de sus hijas por un parlamentario y la muerte de su marido en custodia policial.

La candidata del histórico Partido del Congreso en Unnao, en el estado norteño de Uttar Pradesh, donde hoy se celebra una nueva fase de unas elecciones regionales clave, se enfrenta sin embargo a la mezcla de simpatía y escepticismo de sus vecinos.

Una familia marcada por la injusticia

«La injusticia que nos pasó no debería sucederle a nadie; por eso hemos entrado en política», explica a Efe casi en un susurro Asha Singh, desde la casa de Unnao en la que vive junto con sus cinco hijos y otros familiares, además de una decena de miembros de las fuerzas de seguridad.

El parlamentario regional Kuldeep Singh Sengar, miembro del gobernante Bharatiya Janata Party (BJP) hasta que fue expulsado cuando se conoció el caso, fue condenado a cadena perpetua en 2019 por violar dos años antes a la entonces adolescente hija de Singh, en su residencia a donde acudió la joven a buscar trabajo.

El padre de la joven fue después arrestado por un caso de porte ilegal de armas tras salir la violación a la luz y murió en custodia policial a causa de una paliza de simpatizantes de Sengar, según juzgó un tribunal de Nueva Delhi antes de condenar al exparlamentario a diez años de cárcel.

Ataviada con una bufanda con los colores del Partido del Congreso y dos pulseras rosas con la inscripción «soy una mujer, puedo luchar», la candidata de 55 años está acompañada de su hija, que se cubre el rostro con un pañuelo azul.

«Vagué durante un año y el caso no fue registrado en Unnao, y después de eso mi padre fue asesinado. Cuando intenté inmolarme ante la residencia del jefe de Gobierno (de Uttar Pradesh), aceptaron la denuncia», narra con firmeza la joven de 20 años.

El suceso marcó para siempre a la familia, y en 2019 llevó también a la cárcel a un tío de la joven por un caso de intento de asesinato hace más de dos décadas.

«Mi tío fue implicado en casos falsos por Kuldeep Sengar y enviado a la cárcel», explica.

Entre la simpatía y el rechazo 

La lucha de Singh es «para obtener justicia para todas las hijas que han sido agraviadas», zanja la joven, durante unas elecciones regionales que son clave para el primer ministro indio, Narendra Modi, ante los comicios generales de 2024.

Pero en Unnao, donde como en el resto de Uttar Pradesh los habitantes esperan que la lucha se libre entre el BJP de Modi y el Partido Samajwadi (SP), la candidata del Congreso de la dinastía Nehru-Gandhi parece atraer como mucho una simpatía por su caso que no llega a traducirse en votos, y en buena parte rechazo.

«Puede que la gente tenga simpatía por ella, pero yo no, porque no creo en su historia. La realidad podría ser algo diferente», afirma a Efe Neelam Gaur, ama de casa de unos 40 años y que piensa votar hoy al BJP, en una de las calles céntricas de Unnao.

Radha Tiwari explica que las mujeres simpatizan con la familia, pero expresa también sus dudas sobre si «lo que le pasó fue real».

Vikas Tiwari (sin relación con Radha Tiwari), desde uno de los típicos puestos de té y cigarrillos que bordean la arteria principal de la ciudad, cree que la lucha es entre el BJP y el SP, la formación del exjefe de Gobierno de la región Akilesh Yadav.

Preguntado sobre Singh, Tiwari aduce a la supuesta historia conflictiva de la familia y al tío encarcelado para explicar que no la considera como una candidata viable.

Las dudas sobre si la violación tuvo realmente lugar, a pesar de las dos sentencias contra el exparlamentario del BJP, van más allá de los habitantes de Unnao y se extienden incluso a la prensa nacional.

El diario Indian Express, uno de los más importantes en habla inglesa, se curó en salud al decir que Sengar «supuestamente» violó a la hija de Singh al reportar ayer sobre el último día de la campaña electoral en la ciudad.

Campaña centrada en las mujeres 

Priyanka Gandhi, nieta de la ex primera ministra india Indira Gandhi y encargada de organizar las elecciones en Uttar Pradesh para el Partido del Congreso, reservó el 40% de las candidaturas a mujeres.

«Las mujeres pueden traer un cambio y tienen que dar un paso adelante», dijo Gandhi el pasado octubre.

La candidatura de Singh se enmarca en este programa, en un estado que ha reportado una oleada de brutales casos que acapararon la atención del país.

En otro caso que tuvo lugar también en Unnao, un grupo de hombres prendió fuego en 2019 a una víctima de violación cuando se dirigía a testificar por su caso y que falleció luego por sus quemaduras, mientras que en 2020 la violación y posterior muerte de una joven «intocable» cuyo cuerpo fue quemado por la policía conmocionó al país al tiempo que degeneró en un circo político.

Pero pese al énfasis en las mujeres, analistas y sondeos de opinión consideran que el Partido del Congreso no tiene oportunidades de hacerse con el control del estado más poblado de la India, con 200 millones de habitantes.

¿Se ve Asha Singh con posibilidades de ganar el escaño? «Mejor no preguntar eso», intercede Manisha Sangwan, miembro del histórico partido y que lleva un mes formando a la candidata en el arte de la política, dando a entender que las ambiciones del Congreso van más allá de las regionales y el objetivo son los comicios generales de 2024