CULTURA

Alberto Cortez, una metáfora de la aventura y las cosas simples

El poeta y cantautor argentino Alberto Cortez, interprete de éxitos de la música latinoamericana como «Callejero» o «No soy de aquí ni soy de allá», ganó muchos reconocimientos por sus memorables letras, pero también sus actos le valieron aplausos, como cuando en el festival de Viña del Mar de 1977, instaló una silla vacía y le cantó a Violeta Parra, provocando el retiro de Pinochet y de la Junta de la Quinta Vergara. (ACTUALIZADA)

Era callejero por derecho propio,
su filosofía de la libertad
fue ganar la suya sin atar a otros
y sobre los otros no pasar jamás.
Aunque fue de todos, nunca tuvo dueño
que condicionara su razón de ser…

«El aprendiz de Quijote» tenía previsto hacer una serie de conciertos en Latinoamérica en estos días. Se le esperaba en un «rincón del alma» del Teatro Nacional de Santo Domingo (República Dominicana) y sin ser de «Aquí ni de allá», el cantautor argentino tuvo que suspender una presentación que haría el domingo pasado con Alberto Carrión en Puerto Rico.

El programa se vio cancelado ya que el el 27 de marzo pasado fue internado de urgencia en el Hospital Universitario HM Puerta del Sur, en Móstoles, en las afueras de Madrid. No se recuperó, y así, de la misma forma como narraba en su letras, «Quiso volar igual que las gaviotas», falleciendo este jueves a los 79 años.

El cantante y poeta, nacido en Rancul, La Pampa, el 11 de marzo de 1940 con el nombre de José Alberto García Gallo, era autor de canciones como «Callejero», «Mi árbol y yo», «A partir de mañana», «Te llegará una rosa», «Castillos en el aire», «El Abuelo» o «Cuando un amigo se va».

Poseía cuatro Discos de Oro, cuatro Heraldos de Oro y la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes, residía en España desde 1964 y ya en 1965 participó en el Festival de Palma de Mallorca con la canción «Me lo dijo Pérez», que más tarde interpretarían artistas como Karina, Mochi o Los Tres Sudamericanos.

Cantó con grandes músicos y colegas, entre ellos con su amigo Facundo Cabral, con quien durante años hizo el show Lo Cortez no quita lo Cabral. La Asociación Argentina de Actores anunció la triste noticia a través de las redes sociales: «Lamentamos el fallecimiento del cantante y compositor argentino Alberto Cortez. Nuestras condolencias a sus familiares, amigos y a la comunidad musical».

También grabó el disco En un rincón del alma, con Estela Raval, con Mercedes Sosa hizo el tema «Distancia» y musicalizó  los temas «Retrato «y «Las moscas» con letra de los poemas de Antonio Machado, para un disco de Joan Manuel Serrat.

Desde muy chico fue un apasionado de la música. A los seis años aprendió a tocar el piano, a los doce compuso su primer tema «Un cigarrillo, la lluvia y tú» y a los 21 grabó su primer disco en Amberes, Welcome to the Latin Club.

Nunca le cantó a Pinochet

En los noventa, el poeta sufrió una ACV, del cual se recuperó pero le impidió seguir acompañándose de su guitarra pero no de la música. En 2008, antes de comenzar con una serie de conciertos en Chile, salió al paso de una naciente polémica en España, en donde en un artículo de prensa aseguraron que le había cantado a Pinochet, situación que cantautor negó de manera tajante, afirmando nunca haberle concedido alguna atención al dictador.

En una entrevista que publicó el diario La Nación, recordó que incluso causó el desagrado de Pinochet cuando, en 1977, homenajeó a Violeta Parra en el Festival de la Canción de Viña del Mar. «El Presidente de la República de entonces, de facto por supuesto, con toda su gente, se levantaron y se fueron», recordó el autor de temas de «Miguitas de ternura».

Según señaló, antes de salir al escenario un amigo le dijo que se cumplían diez años de la muerte de Violeta Parra, que se quitó la vida en febrero de 1967. Entonces pusieron una silla vacía en el escenario, la iluminaron, y Cortez dijo: «vamos a hacer de cuenta que esta noche ella está sentada aquí con nosotros». Uno de sus músicos comenzó a tocar el charango, y él entonó «Gracias a la vida».

Con 42 discos editados, el 2005 grabó  «Identidad», obra que considera su obra más personal. Dos años después le concedieron el Grammy a la trayectoria .

Como una «metáfora de la aventura musical», la carrera musical de del poeta nacido en La Pampa, recibió uno de sus últimos homenajes el 2015, con medalla de oro al Mérito en las Bellas Artes de España.

«En cualquier día, en cualquiera hora y en cualquier lugar», en distintos escenarios de habla hispana se preparan conciertos en homenaje al cantautor argentino que «deja una silla vacía».