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Profesor imputado por daños en el Metro pide perdón: «No pensé, actué irracionalmente»

«Yo no debí haber hecho eso nunca, pero me dejé llevar», dijo Roberto Campos.

El profesor Roberto Campos, quien pasó 56 días en prisión preventiva en la Cárcel de Alta Seguridad (CAS) tras haber sido imputado por daños en la estación del Metro San Joaquín en el inicio del estallido social, expresó arrepentimiento por sus actos.

A Campos se le imputa el delito de daños calificados, por lo que arriesga 541 días de presidio, pero frente a la aplicación de Ley de Seguridad del Estado, esta pena parte en tres años y medio. Tras salir de la cárcel, cumple con arresto domiciliario nocturno, firma semanal y prohibición de acercarse a cualquiera de las 136 estaciones del Metro de Santiago.

«El torniquete ya estaba roto cuando le pegué», dijo el docente en entrevista con CHV Noticias, explicando cómo en los videos que registraron su actuar se aprecia que la lámina que utilizó para golpar el dispositivo era de un material de débil consistencia.

Campos explicó que «sentía rabia por las injusticias sociales, porque ser profesor no es fácil (…) No tengo cubiertos mis derechos sociales básicos, la salud por ejemplo. Y todo lo que ha sucedido a lo largo de la historia con los profesores, la deuda histórica, que posiblemente cuando jubile voy a ganar el sueldo mínimo y fueron todas esas injusticias que en ese momento me obnubilaron y le pegué al Metro, le pegué al torniquete».

«No pensé, actué irracionalmente», aseveró, agregando que «yo no debí haber hecho eso nunca, pero me dejé llevar, porque en ese momento la efervescencia, la euforia de todo el público que estaba ahí, me uní, le pudo haber pasado a cualquiera».