Tenga mucho ojo con los avances en efectivo, ya que si usted pide $100.000 podría cancelar hasta $236.167, es decir, $135.587 por sobre el dinero solicitado. Además, se recomienda comprar con tarjetas de crédito, ya que uno se ahorraría hasta un 40%.
Un estudio del Servicio Nacional del Consumidor mostró diferencias de hasta un 135% en el pago de un crédito de consumo, por lo que quienes lo piden pueden terminar pagando hasta más del doble del dinero que pidieron.
La encuesta precisa que por un avance en efectivo, un consumidor puede cancelar $100.600 en una institución crediticia, mientras que en otra podría llegar a pagar unos $236.167.
El análisis se hizo para ayudar a las familias que tengan que tomar una decisión, debido a que está finalizando marzo y muchos recurren a los avances para poder terminar el mes o cubrir gastos extras que han tenido que enfrentar, como matrículas, uniformes y útiles escolares, permisos de circulación, además de arreglos en sus hogares tras el terremoto.
Por tal motivo, el organismo de defensa del consumidor recomendó cotizar y poner atención en qué tipo de cliente es cada persona para las instituciones financieras, ya que con eso se puede acceder a condiciones de préstamos distintas.
Las instituciones consideran para el otorgamiento de los dineros diversos asuntos como la antigüedad laboral, los ingresos y los hábitos de pago, entre otros.
No tan bueno, bonito y barato
El Sernac, dentro de su estudio, estableció que la mayor amplitud en las condiciones de los créditos de acuerdo al tipo de cliente fue el Banco Santander, donde un consumidor podría ahorrar hasta el 106% en el total de la deuda.
En cuanto a la hora de pedir un avance en efectivo, el organismo detectó que las tarjetas de Hites, Abc-Din, Tricard, Santander Banefe, Banco Corpbanca y Banco Condell son las que realizan mayores cobros.
Sin embargo, las de Abc y Din existe una diferencia respecto a otras tarjetas, ya que estas aplican un cargo fijo por el avance más un cargo específico por cada cuota pactada, lo cual no ocurre en el resto de los casos.
Usar tarjeta de crédito o pedir avance
Uno de los grandes problemas que enfrentan los consumidores al momento de decidir es si se opta por un avance en efectivo o pagar con tarjeta de crédito.
Para esto, el Sernac decidió comparar los costos mínimos y máximos, tomando como base de ejemplo una compra de $100.000, cuyo resultado determinó, en más del 80% de los casos, que más económico hacer la compra con una tarjeta de crédito.
