Experto en educación y ex ministro de Eduardo Frei Ruiz-Tagle
Respecto a la Gratuidad indica que «el Gobierno infló de una manera muy descuidada y poco responsable una meta de gratuidad universal completamente irrealizable» y que medidas como esta han generado «rechazo de muy distinto tipo, cada uno es por una razón específica, uno no puede decir todo el mundo está en contra», porque hay distintos ángulos, aseveró.
El académico de la Universidad Diego Portales, experto de la Unesco y ex ministro secretario general de Gobierno durante la administración de Eduardo Frei Ruiz-Tagle, José Joaquín Brunner, desmenuzó el panorama que afrontará la Reforma a la Educación Superior que fue ingresada al Congreso este lunes.
«Es una propuesta desordenada, técnicamente débil, con muchas confusiones y llama la atención que después de dos años de trabajo finalmente lo que se haya presentado ha generado más bien divisiones y rechazo y no un entusiasmo», señaló Brunner a Canal 24 Horas.
El experto indicó que «al proyecto le falta una visión y estrategia de futuro», lo que «el Gobierno no ha querido dilucidar, no tenemos una visión de mediano y largo plazo», lo que obliga a una discusión «que se vuelve muy específica y relacionada con los intereses corporativos de cada uno de los involucrados en el proyecto»
Respecto a la Gratuidad, Brunner indica que «el Gobierno infló de una manera muy descuidada y poco responsable una meta de gratuidad universal completamente irrealizable» y que medidas como esta han generado «rechazo de muy distinto tipo, cada uno es por una razón específica, uno no puede decir todo el mundo está en contra», porque hay distintos ángulos, aseveró.
Para el ex ministro el proyecto es reflejo de la «bajísima comprensión de cuánto cuesta el sistema» de educación superior y que demuestra que era una mala idea la de «refundar el sistema y cambiar el paradigma», debido a que
«no hay ningún punto que vaya a generar fácil consenso».
Finalmente, criticó el hecho de que haya «un tremendo aparato de control que está basado en una supuesta desconfianza en el sistema» y agregó que le parece «un error garrafal creer que desde el Mineduc y sus nuevos aparatos pueden controlarlo todo».
