«Él no representa a los evangélicos ni a sus líderes, ni a las organizaciones cristianas, porque los evangélicos creemos en la convivencia respetuosa entres las personas», dijo el relacionador público de la Catedral Evengélica sobre el predicador homofóbico.
El relacionador público de la Catedral Evangélica de Chile, Eduardo Duran, anunció que el predicador homofóbico Javier Soto, condenado a una pena remitida por el delito de injurias con publicidad contra el dirigente del Movilh Rolando Jiménez, no podrá participar en el tradicional Te Deum evangélico de septiembre próximo.
«El mundo evangélico nada tiene que ver con personas fanáticas que en forma violenta y ofensiva pretenden evangelizar a otros», dijo Durán sobre el autodenominado «pastor», quien hizo noticia hace pocos días después de ser echado de un programa de televisión del canal Vía X tras pisotear una bandera de la diversidad.
Asimismo, indicó que el accionar de este personaje que suele instalarse a vociferar mensajes contra la comuniad LGBT en las afueras del Congreso Nacional «contraviene severamente la misión pastoral del mundo evangélico».
Finalmente, Durán insistió en que «en mi opinión, el ‘pastor’ Soto, es una preocupante expresión de intolerancia, que busca amparar detrás de una biblia la agresión y la discriminación. Él no representa a los evangélicos ni a sus líderes, ni a las organizaciones cristianas, porque los evangélicos creemos en la convivencia respetuosa entres las personas. Desde esa mirada el señor Soto se coloca al margen de esta condición. En lo personal tampoco nos consta su condición de pastor con estudios en teología y ordenado por alguna corporación».
