Anuncio durante Asamblea de la ONU incluye a todas las comunas costeras
«Esta ley permitir a la ciudadanía aportar en la protección de los océanos. Seremos, así, el primer país de América en implementar este tipo de ley, y llamamos a que otros países asuman esta responsabilidad”, dijo la jefa de Estado en Nueva York.
La Presidenta Michelle Bachelet anunció este miércoles, durante su intervención en a 72° Asamblea General de las Naciones Unidas que se celebra en Nueva York, el ingreso de una indicación sustitutiva que tendrá como fin prohibir el uso de bolsas plásticas en el comercio de comunas costeras oceánicas a lo largo de todo el país.
Lo anterior, debido a que la contaminación en los océanos de todo el mundo, es un problema ambiental que alerta a las autoridades y amenaza nuestro ecosistema, considerando que a 2050 existiría igual cantidad de plástico que peces en los mares.
En su discurso, la presidenta comunicó que “presentaremos un proyecto de ley que prohibirá el uso de bolsas plásticas en ciudades costeras en un plazo de 12 meses. Esta ley permitir a la ciudadanía aportar en la protección de los océanos. Seremos, así, el primer país de América en implementar este tipo de ley, y llamamos a que otros países asuman esta responsabilidad”, destacó.
Por su parte el ministro de Medio Ambiente, Marcelo Mena, quien acompañó a la mandataria en la Asamblea, recalcó que «La prohibición de bolsas plásticas en comunas costeras es fundamental para la protección de los océanos y su biodiversidad. Abarca un problema de manejo de residuos, del cual debemos hacernos cargo a corto plazo, porque las consecuencias ponen en riesgo la preservación de nuestras especies”, dijo.
El proyecto se enmarca como parte de la estrategia de protección oceánica cuyo compromiso de gobierno permitirá pasar de un 4,3% de protección de zonas económicas exclusivas existentes en el año 2014, a un 46% en 2018.
La preocupación por el medio ambiente manifestada por la jefa de Estado en Nueva York contrasta con las cifras exhibidas por su anterior administración en esta materia, ya que fue el período en el que se aprobó la mayor cantidad de centrales termoeléctricas. Eran eso sí otros tiempos, ya que el país venía de enfrentar los cortes de envíos del gas argentino, presentaba una limitada capacidad de autogeneración y estaba fresca una crisis internacional que llevó a que sacar adelante estas iniciativas se convirtiera en un tema prioritario.
