El superintendente de Electricidad y Combustibles, Luis Ávila, anunció que las compensaciones por el corte de energía que afectó a gran parte del país durante el sábado pasado, serían equivalentes hasta el doble del valor por la energía no suministrada durante la interrupción.
«Las compensaciones por interrupciones no autorizadas de suministro, operan en forma automática, una vez que la autoridad así lo determine. El monto a compensar será equivalente al doble del valor de la energía no suministrada durante la interrupción», dijo Ávila.
«Para determinar el valor del tiempo que corresponde a cada cliente, se toma como referencia el promedio de las 12 últimas facturaciones, por lo que, ante un mismo evento, puede haber distintos montos para cada uno de los afectados», explicó la autoridad.
El superintendente agregó que en cuanto a la reparación de artefactos dañados a causa de la interrupción del suministro eléctrico, las personas afectadas deben presentar los antecedentes ante su empresa distribuidora, la que deberá responder dentro de un plazo de 30 días.
«Asimismo, si una persona a raíz de este blackout sufrió otro tipo de daño, podrá recurrir a los tribunales de justicia o al Sernac para recibir la orientación necesaria», afirmó el máximo representante del organismo fiscalizador.
A su vez, Ávila junto al ministro de Energía, Rodrigo Álvarez, dieron a conocer los avances de la investigación sobre el corte energético que afecto a más de 9 millones de personas, entre las regiones de Coquimbo y del Maule, reiterando que se van a realizar las indagaciones respectivas para aplicar las sanciones que la normativa vigente contempla.
«Están los equipos técnicos analizando en detalle, recogiendo toda la información necesaria para determinar cuál fue la causa exacta de esta falla (…) Vamos a ser muy rigurosos en esta investigación, a fin de determinar responsabilidades tras este evento», sostuvo el ministro Álvarez.
El secretario de Estado agregó que el ministerio que dirige se encuentra realizando una serie de estudios a fin de fortalecer el sistema de transmisión eléctrica, y así minimizar los riesgos de nuevos eventuales cortes de suministro.
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