Publicidad
Liceo Experimental Artístico de Santiago evalúa paro y evidencia crisis generalizada del sector educacional artístico

Liceo Experimental Artístico de Santiago evalúa paro y evidencia crisis generalizada del sector educacional artístico

La última postergación, de parte del Mineduc, a una reunión con el Liceo Experimental Artístico de Santiago, fue la gota que rebalsó el vaso: esta semana los trabajadores se irían a huelga. La crisis es un ejemplo más de la precariedad en que se encuentran las escuelas artísticas en el país, el que -según Agrupación Nacional de Directores de Escuelas Artísticas- se recrudece por el nulo avance en la implementación del Plan Nacional de Arte en la Educación 2015-2018.


La crisis del emblemático Liceo Experimental Artístico (LEA) de Santiago llegó a su punto máximo. Problemas con la Corporación Educacional de Desarrollo Artístico que administra el colegio, y la desidia que dicen sentir de parte del Ministerio de Educación, que de manera consecutiva viene postergando reuniones para analizar su situación, llevó al colegio a realizar una jornada de reflexión que muy probablemente terminará en paro esta semana. Este caso es un ejemplo de la extrema crisis y abandono en que se encuentran los colegios y liceos artísticos, que suman unos diez mil alumnos y mil docentes en el país. Una crisis que no hace más que evidenciar la desigualdad de oportunidades para acceder a la cultura y la falta de conocimiento artístico.

Por primera vez, Chile tiene una política nacional clara en relación al arte en la educación, pero el nulo avance en la implementación del Plan Nacional de Arte en la Educación 2015-2018, elaborado conjuntamente por el  Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (CNCA) y el Ministerio de Educación (Mineduc), ha acentuado -según las conclusiones de la Agrupación Nacional de Directores de Escuelas Artísticas (ANDEA) y la Unión Nacional de Artistas (UNA), en el marco de la III Semana Internacional de la Educación Artística- la precaria situación de la educación artística, el deplorable estado de infraestructura de los colegios y la subestimación e indiferencia de parte del Estado a la hora de canalizar y reconocer el talento de los jóvenes en las artes.

Este diagnóstico fue desarrollado por la Agrupación Nacional de Directores de Escuelas Artísticas (ANDEA), junto a la Unión Nacional de Artistas (UNA), en el marco de la III Semana Internacional de la Educación Artística, oportunidad en que intercambiaron visiones respecto de la educación artística, su relevancia, articulación y proyección tanto en establecimientos tradicionales como especializados en la educación secundaria y universitaria.

El Liceo Experimental

El Liceo Experimental Artístico de Santiago, LEA, creado en 1947, es una institución educativa especializada artes y cultura, perteneciente al Ministerio de Educación, cuya administración depende en la actualidad de la Corporación Educacional de Desarrollo Artístico. Imparte educación general básica, media y técnico profesional en artes, siendo su modelo único en su tipo en el país, y tiene unos 450 estudiantes.

Por sus aulas han pasado destacados personajes como el pianista Roberto Bravo, el muralista Alejandro “Mono” González, el diseñador teatral Cristián Reyes y la bailarina y coreógrafa Natalia Cuellar, varios de los cuales han sido parte de la campaña “Salvemos el LEA”, que comenzó en enero de este año.

El sindicato del LEA, encabezado por Ramón Vergara, está enfrentado con la privada Corporación Educacional de Desarrollo Artístico -que administra el colegio- por problemas laborales y financieros que se arrastran de hace un buen tiempo.

“Te puedo contar que la mala administración financiera de la corporación es tal, que no tienen dinero para el funcionamiento mínimo del Liceo y si funciona con relativa normalidad es gracias al trabajo de los docentes, auxiliares, administrativos y del equipo directivo liderado por Marco Llerena, quien ha sido un pilar fundamental para los trabajadores y estudiantes del Liceo”, afirma Vergara, un guitarrista de gran prestigio.

Las razones de la crisis

El mes pasado, el sindicato del LEA denunció los problemas existentes ante la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados.

“Si bien gracias a las gestiones del Ministerio de Educación tendremos el 2017 un nuevo edificio que ha sido especialmente diseñado para nosotros después de 17 años de espera en condiciones deplorables en que incluso los baños del Liceo fueron utilizados como espacios educativos, nos ocupa y alarma la mala administración que padecemos en la actualidad”, denunciaron en esa oportunidad.

Indicaron que la crisis no sólo se explicaba por la dependencia del sistema de administración delegada para la educación técnico profesional en Chile del Ministerio de Educación -una norma de la dictadura (1980) que entregó la administración de ciertos colegios a corporaciones privadas-, sino también “por la mala administración de la Corporación privada que en este instante ya colapsada financieramente, que arrastra déficit y deudas por más de 70 millones de pesos, y está conformada por personas que no han demostrado estos años capacidades para gestionar a esta emblemática institución nacional de más de 70 años de tradición formativa”.

La situación es de tal gravedad que actualmente el Ministerio de Educación está realizando una auditoría, cuyos resultados se informarán próximamente.

Según explica Marco Llerena, director del LEA, la situación financiera se explica en parte porque la Corporación ha perdido juicios en tribunales por más de 50 millones de pesos, y al no tener ingresos adicionales, paga de los gastos de honorarios del personal.

Toda la situación “está provocando un desgaste y crisis que afecta la operatividad  y funcionamiento del Liceo, además de conflictos y demandas ante la Inspección del Trabajo debido al no pago de los beneficios laborales mencionados”, acusa Llerena, un licenciado en Arte de la Universidad de Chile, quien asumió en junio de 2013 tras ganar un concurso público.

Para Vergara, la gestión financiera ha sido “un desastre”. “La entidad que nos administra ha mostrado claras señales que tiene una incapacidad de gestión administrativa y financiera”, asegura. “Ellos reciben del Estado más $750.000.000 anuales, que ahora es entregado de manera parcial en cuotas mensuales, ya que el ministerio teme que la Corporación indemnice con esos dineros a sus socios con cargo directivo en el LEA, como lo han hecho en el pasado y que ha sido motivo de una auditoría por parte del Ministerio”.

Según el presidente del sindicato, la situación ha empeorado desde que llegó el nuevo directorio de la Corporación. “Hemos trabajado en la miseria más absoluta, no se pueden sacar fotocopias en el Liceo, la Corporación debe el agua y la luz del establecimiento, si algo se estropea no hay dinero para repararlo, no reponen los artículos de aseo, y deben dineros de la negociación colectiva a los trabajadores”.

“Siendo honestos, sabemos todas y todos -padres, apoderados, alumnos, ex alumnos, profesores y los nuevos componentes de la Corporación, en definitiva la comunidad toda- que las administraciones anteriores junto a la dirección no han estado a la altura de lo que un Liceo emblemático como este merece y necesita, y que las circunstancias políticas como administrativas han decantado en la actual situación que ahora como comunidad LEA tenemos que sobrellevar”, señalan David Torres y Claudia Barahona, líderes del Centro de Padres y Apoderados del LEA.

Felipe Melo, Melo, Seremi de Educación de la Región Metropolitana y  por cierto ex presidente de la Fech (2005), efectivamente el colegio “tiene una serie de desafíos que superar” y expresó su confianza en una resolución a través de la auditoría “que debiera estar concluyendo su trámite actualmente”. También destacó en que “si uno saca los montos genéricos de aporte del Estado a este establecimiento, son muy superiores a los que tiene prácticamente cualquier otro establecimiento público”.

Para Llerena, la solución de los problemas efectivamente es la definición de las decisiones que asumirá el Mineduc en base a esta auditoría. “Esa decisión implicará la continuidad de la actual corporación administradora o su cambio por la vía de la ampliación a otra entidad ya en convenio como la Universidad de Santiago o la licitación pública”, dice. “Todo esto de carácter urgente por la vorágine actual de acumulación de deudas de la corporación administradora actual”.

“Históricamente los problemas del LEA ha sido la Corporación Educacional de Desarrollo Artístico, nuestra entidad administradora, ellos se tienen que ir”, remarca Vergara. “El ministerio tiene que nombrar un interventor y que se llame a licitación, para que llegue una institución con respaldo financiero, capacidad de gestión y que esté relacionada con el ámbito del Arte y la Cultura”.

El abandono de las escuelas artísticas

Jorge Montealegre, tesorero de UNA, explica que desde hace años las escuelas experimentales artísticas han sufrido un verdadero abandono, “que es muy injusto por su larga y rica historia de formación de talentos”. Según Montealegre,  hay una heterogeneidad entre ellas que ha implicado un trato diferenciado y falta un reconocimiento de las escuelas especializadas en artes que les permita acceder a fondos públicos, como por ejemplo a los Fondos del Plan Nacional de Artes en la Educación.

“Sólo dos escuelas experimentales artísticas cuentan con decretos especiales”, remarca el escritor y director de Extensión de la Universidad de Santiago. “La precariedad de su inserción en el sistema, su excepcionalidad, lleva a que la mayoría de sus planes de estudio especiales no cuentan con reconocimiento, financiamiento especial, perfeccionamiento de sus docentes, materiales didácticos específicos e infraestructuras adecuadas, entre otras carencias”.

Una opinión similar tiene Jorge Morán, director del Instituto Artístico de Estudios Secundarios de la Universidad de Chile y presidente de la Agrupación Nacional de Directores de Escuelas Artísticas (ANDEA).

“La situación de la educación escolar en Chile es precaria, estos establecimientos se mantienen, en gran medida,  por el esfuerzo de sus propias comunidades”, dice. “Gran parte de ellos son administrados por corporaciones municipales y unos pocos por corporaciones privadas con aportes de la subvención escolar. Toda este sector  tratado en forma equivalentes, al resto de las  entidades de educación humanístico científico, sin consideración de la especificidad que tienen, sin el apoyo eficaz  en el ciclo educativo que puede potenciar a quienes deben lograr su desarrollo antes del término de la etapa escolar, atendiendo a  niños  y jóvenes con intereses y talentos artísticos”.

Para Morán, el Mineduc no ha expresado en acciones una comprensión efectiva, que se traduzca en el reconocimiento de la validez de esta opción de estudios.

“La preocupación del Mineduc ha sido hasta ahora deficiente, marginal, descoordinada y de escasa credibilidad”, critica. “No se observa voluntad política para actuar”.

Admite, en cambio, iniciativas más claras por parte del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (CNCA), un organismo que “ha demostrado sensibilidad por el estado de las escuelas”, que aún sin ser estas su responsabilidad directa, “aporta con lo que puede y lo hace con gran entusiasmo”.

“La preocupación por educación escolar artística es deber del Mineduc en tanto se trata del desarrollo educativo y es a este organismo a quien le compete”, insiste Morán.

el único país del Estudio de Caracterización de Escuelas Artísticas el cual no posee financiamiento especial para la educación artística diferenciada, ni privado ni estatal. Tres de cada cuatro escuelas artísticas formales se financia a través de proyectos concursables, y más de la mitad con la subvención regular. Un 42,8% utiliza financiamiento de la subvención escolar preferencial, y una de cada tres recurre a fondos por iniciativas propias de la escuela”

Propuestas de solución

Los miembros de esta modalidad escolar, sin embargo, no se han quedado en las críticas y tienen sus ideas para mejorar la situación. Según una propuesta que está siendo desarrollada por Colegio Artístico Salvador (CAS), el Instituto de Estudios Secundarios Universidad de Chile(ISUCH) y el Liceo Experimental Artístico de Santiago, en coordinación con la Agrupación de Escuelas Artísticas de Chile, existen cinco grandes problemáticas  a resolver para permitir un buen desarrollo de la educación artística diferenciada en Chile.

Entre ellas mencionan la necesidad de una Subvención Especial para Escuelas Artísticas (entre otros, debido a la infraestructura y los materiales requeridos, y la especialización de su planta docente); de un sistema de Evaluación y Monitoreo diferenciado que asegure la calidad de la enseñanza artística; una articulación entre educación artística escolar y educación superior; de acreditación y reconocimiento por parte del Ministerio de Educación a los establecimientos que desarrollan educación artística especializada en Chile; y por último, de financiamiento de infraestructura necesaria para desarrollar educación artística de calidad.

Si bien reconocen avances, especialmente a partir de 2007, cuando se publica el Decreto Supremo N° 3 de Educación, que sienta las bases curriculares para la nueva modalidad de Educación Diferenciada Artística, y con la Ley General de Educación del año 2009, que establece que en Chile existen tres modalidades de enseñanza: científico-humanista, técnico-profesional, y artística, “este marco normativo, que le otorga legitimidad legal a la educación artística diferenciada, omitió una etapa fundamental posterior al marco curricular: el financiamiento”.

 

 

 

 

 

Publicidad

Tendencias