Los resultados publicados el jueves tranquilizaron a los inversores al demostrar que Amazon puede gastar dinero en áreas como la publicidad, el entretenimiento y los supermercados sin dejar de dominar las compras online y la computación en nube
Jeff Bezos, el máximo ejecutivo de Amazon.com Inc., ya puede festejar.
Años de inversiones en depósitos, robots, centros de datos y dispositivos —que en muchos casos pusieron a prueba la paciencia de los inversores— le dieron grandes frutos a Amazon en la temporada de las fiestas de fin de año. Los compradores pusieron su dinero en el gigante del comercio electrónico, lo cual le brindó a la empresa el crecimiento más fuerte de sus ventas en un cuarto trimestre en ocho años y el trimestre más rentable de su historia.
Los resultados publicados el jueves tranquilizaron a los inversores al demostrar que Amazon puede gastar dinero en áreas como la publicidad, el entretenimiento y los supermercados sin dejar de dominar las compras online y la computación en nube. Inclusive el crecimiento de los ingresos está acelerando, en tanto se anticipa que la empresa supere los US$200.000 millones en ventas este año y gane más dinero con su división original, la venta minorista online en Estados Unidos.
“Están en llamas”, dijo Sucharita Kodali, analista de Forrester Research. “Hoy son la empresa más popular del mundo, sin lugar a dudas, y parecen imparables”.
Ganancias
El director de finanzas, Brian Olsavsky, dijo que Amazon Web Services, la rentable unidad de computación en nube de la empresa, y su incipiente división de publicidad aportaron mucho al crecimiento de las ventas y las ganancias. Los ingresos de AWS aumentaron 45 por ciento y llegaron a US$5.100 millones, anunció la empresa con sede en Seattle en un comunicado. También ayudó aumentar la eficiencia de sus depósitos en EE.UU. —donde se guardan, empaquetan y envían los productos a los clientes—, dijo Olsavsky.
Los ingresos crecieron 38 por ciento, a US$60.500 millones, en el cuarto trimestre, el incremento más grande en un período de fin de año desde un salto de 42 por ciento en 2009. La utilidad neta ascendió a US$1.900 millones —un récord para la empresa—, US$3,75 por acción. Los analistas habían proyectado ganancias de US$1,83 por acción con base en ventas por US$59.800 millones. Amazon dijo que entre sus ganancias hay un beneficio de US$789 millones como resultado de la nueva ley impositiva de EE.UU.
Las acciones llegaron a avanzar 6,8 por ciento en las operaciones extendidas tras cerrar a US$1.390 en Nueva York. En los últimos 12 meses, dieron un salto de 67 por ciento.
“Están superando las expectativas de generación de más demanda para la plataforma y crecimiento de la rentabilidad”, dijo James Cakmak, analista de Monness Crespi Hardt & Co.
Muchas veces, los inversores se preguntan cuán rápido gastará Bezos el dinero de su empresa. Los gastos operativos en el trimestre subieron 37 por ciento y llegaron a US$58.300 millones, ritmo semejante al del crecimiento de los ingresos. Su más reciente objetivo es bajar los crecientes costos de la atención médica, algo que pretende hacer en asociación con Berkshire Hathaway Inc. y JPMorgan Chase & Co. Alexa, la plataforma de Amazon activada por voz, también recibirá más fondos; Bezos prometió “intensificar” la búsqueda de nuevos usos para esa tecnología, que funciona de soporte para los populares parlantes domésticos Echo.
