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La agenda oculta de Adolfo Zaldívar tras su proclamación presidencial

Aunque para algunos la decisión de Zaldívar es una maniobra para más tarde dar un paso al lado y proclamar a Soledad Alvear, y luego »negociarla» con el PS-PPD, para otros sólo intenta medir fuerzas al interior de la DC. Hay quienes creen, a su vez, en sus reales posibilidades como presidenciable.


Tras la arremetida presidencial del fin de semana de Adolfo Zaldívar como "presidenciable" de la Democracia Cristiana, las "tesis" y los "apoyos" al interior de la colectividad de la flecha roja comenzaron a multiplicarse. Aunque no hay nadie en el partido que no asegure que las pretensiones del presidente de la falange son "legítimas", hay muchos que sospechan de sus reales intenciones.



Aunque para algunos, la decisión de Zaldívar de ser candidato es sólo una maniobra para más tarde dar un paso al costado y proclamar él a Soledad Alvear, y luego "negociarla" con el PS-PPD y así obtener más cupos para las parlamentarias, para otros sólo se trata de una medición de fuerzas al interior de la Democracia Cristiana.



Esto, porque al ser Zaldívar candidato, se daría una competencia interna donde el primer "gallito" de la Junta Nacional de enero próximo, sería el mecanismo para escoger entre los candidatos. Quien gane esa pelea, aseguran, será quien tenga la sartén por el mango.



Según se comenta, la principal razón de Zaldívar para lanzarse como candidato al ruedo es que de no haber competencia y con una proclamación inmediata de Soledad Alvear, será el gutismo el que maneje la balanza a su favor y el bloque PS-PPD negociará directamente con ellos. Esto es lo que el timonel de la DC quiere evitar.



Con la candidatura de Zaldívar, sostienen en el partido, "se medirán las fuerzas internas y el bloque PS-PPD va a reconocer quién tiene el poder, y con el que gane van a negociar. Esa es su jugada".



Apoyos se multiplican



Pero mientras la candidatura de Zaldívar era el comentario obligado en todos los programas radiales de la mañana, los "niños símbolo" de las elecciones municipales, Alberto Undurraga y Claudio Orrego concurrían a un conocido bar de Providencia a darle el apoyo explícito a Soledad Alvear. Hoy, en tanto, Alvear se reunirá con cerca de mil 500 jóvenes, en el Teatro Oriente.



Tanto Orrego como Undurraga se convirtieron en los alcaldes emblemáticos de la Concertación al arrebatarle a la derecha los municipios de Peñalolen y Maipú, respectivamente.



Aunque ambos insistieron en que el encuentro con Alvear no tiene que ver con las declaraciones formuladas el fin de semana por el timonel de la falange, donde acusó a la ex canciller de ser la candidata del continuismo, coincidió en un definido apoyo a "una oportunidad que Chile no se puede farrear".



"Nuestro encuentro representa una consecuencia con lo que hemos venido diciendo con Claudio desde hace bastantes meses, que la política requiere caras nuevas y así como nosotros representamos en alguna medida estas caras nuevas, esta fuerza nueva, este aire nuevo para los municipios, creemos que Soledad Alvear lo representa para el país y por eso hemos programado este almuerzo para darle explícitamente nuestro respaldo como candidata presidencial de la Democracia Cristiana primero, y de la Concertación después", aseguró Undurraga.



Orrego, en tanto, explicó que "hemos querido con Alberto ofrecerle no sólo nuestro compromiso, sino el de muchos de nuestra generación, que estuvieron con nosotros en nuestras gestas municipales y que hoy quieren sumarse con ganas, con pasión, a lo que representa Soledad Alvear y demostrar que así como hace algunos meses pocos creían que quienes estábamos yendo a Maipú y a Peñalolen podíamos ganar, para los escépticos de hoy decirles que estamos convencidos que Soledad Alvear va a ser la candidata y va a ser la futura presidenta de Chile".



Esperando la Junta



Pero el apoyo recibido por Orrego y Undurraga y la crítica abierta y pública que hizo el diputado Jorge Burgos a las declaraciones del timonel de la falange en La entrevista del Domingo, de TVN comienzan a formar un nuevo escenario para enfrentar a la Junta Nacional del 14, 15 y 16 de enero próximo.



De hecho, los tres personeros son hombres cercanos al senador Eduardo Frei, quien hasta ahora figura como otro de los presidenciables de la Concertación, aunque, según ha trascendido, el ex mandatario declinaría sus aspiraciones en favor de Alvear. De ahí la señal pública que han dado sus militantes más cercanos. El apoyo de Frei sería para la ex canciller y no para Zaldívar.



No obstante estas adhesiones, el escenario se complica para Alvear. Mientras algunos esperan que ese día sea aclamada como candidata presidencial de la DC, para otros sus intenciones fracasarán debido al gran respaldo que tienen los colorines en la Junta.



En este sentido, explican, que lo que ha hecho Zaldívar en estas últimas semanas es ordenar a su gente para no repetir el escenario que se dio en la Junta de marzo pasado, donde un "desorden" en las filas de Adolfo ayudó a que los disidentes obtuvieran más consejeros de lo que esperaban.



Sin embargo, quienes están por la candidatura de Alvear aseguran que el apoyo a la ex canciller es transversal y que "no se trata acá de que un comunista vote por un UDI. Aquí son los dos del mismo partido, los principios son los mismos, y por lo tanto cada militante va a elegir al candidato que tiene mejores posibilidades, y esa es Soledad Alvear".



Critican el nuevo discurso de Zaldívar



Aunque para los cercanos a Alvear el fuerte discurso de Zaldívar a favor de la clase media y la microempresa sólo puede "sumar" y en ningún caso será una forma para atacar un punto débil de la ex canciller, para los cercanos al senador Frei esto es sólo "un diagnóstico de Zaldívar" y en ningún caso una propuesta.



En ese sentido, explican, que "lo que ha hecho Zaldívar simplemente es tomar los principios de la Democracia Cristiana. La clase media no es propiedad de Zaldívar, y ahí lo que él hace es presentar un simple dilema porque apela al descontento, pero no da soluciones y eso es populista".



En este sentido, explican, Zaldívar cae en lo mismo que él critica: en no presentar ninguna propuesta, al igual que las otras candidatas.

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