Las motivaciones medioambientales no tendrían nada que ver con las acciones judiciales impulsadas por el parlamentario PPD contra la secretaria de Estado por su responsabilidad en los altos índices de contaminación capitalinos. El meollo del asunto se gestó mientras Uriarte era directora ejecutiva de la Conama, cargo desde el que se habría negado a las peticiones del parlamentario de involucrarse en la gestión y de incluir funcionarios apadrinados por él.
No fue una sorpresa para la ministra de Medioambiente, Ana Lya Uriarte, ni para muchos funcionarios de la Conama, el anuncio del recurso de protección que el senador Guido Girardi (PPD) pretende presentar el próximo lunes en su contra. La certeza en su círculo, es que esto no tiene nada que ver con la contaminación atmosférica en la Región Metropolitana.
El asunto estaría directamente ligado a la relación que mantuvieron la militante socialista, cercana a Camilo Escalona (PS) y el parlamentario PPD, quien tendría "sangre en el ojo" con ella. Así lo relatan algunas fuentes de la Conama e incluso del propio partido del senador.
La historia se remonta a 2006, cuando Uriarte asumió como directora ejecutiva de la entidad. Al principio, sostuvo algunas reuniones en la mejor de las sintonías con Girardi, pero las relaciones empezaron a fracturarse cuando este último empezó a arremeter con una serie de peticiones para involucrarse en la gestión y conducción de la institución, relacionadas principalmente con el ingreso de funcionarios de su colectividad.
En el mismo estilo conocido en el Ministerio de Salud (Minsal), y que le valió el apelativo del "zar" del Servicio de Salud Metropolitano Norte (SSMN), tal como publicó El Mostrador en el artículo "Las Intrincadas Redes Políticas detrás del drama del Hospital San José", el concertacionista intentó ampliar la extensa red que mantiene en el aparato público, pero esta vez relacionada con otro de sus caballitos de batalla: el medio ambiente.
Pero Uriarte no aceptó el negocio. Lo que generó una rencilla que dura hasta hoy. "El quiebre definitivo lo gatilló la solicitud de Girardi de colocar algunos nombres en la Conama que a la ministra no le parecieron ni idóneos, ni con la capacidad técnica. En el fondo, ella le dijo que no y Guido no está acostumbrado a que le digan que no", relatan fuentes de la entidad. El distanciamiento entre ambos fue un secreto a voces, por lo que algunos parlamentarios reconocen es que "nunca han tenido buenas migas".
En todo caso el ataque a la gestión de la abogada, en opinión de integrantes del PPD, no es la primera señal de este antagonismo. "Desde lo de la Conama Guido la ha hostilizado permanentemente. Lo mismo que hizo con Antonio Infante (ex subsecretario de Salud), que cuando asumió -como director del SSMN-le pasó la cuenta por el corte a asesores a honorarios en la subsecretaría que no prestaban servicios efectivos, y que eran del círculo de Girardi. Y desde ese momento se la juró a Infante".
A diferencia de Infante, la abogada contaba con fuertes espaldas políticas que le permitieron continuar en su cargo sin problemas e incluso convertirse en Secretaria de Estado. El propio Escalona la propuso a la Presidenta Michelle Bachelet para ambos cargos. Y fue él mismo quien le dijo que no se preocupara de Girardi y que continuara con lo que estaba haciendo, luego de algunas conversaciones en que Uriarte le comentó de las presiones del parlamentario.
"Todos sabemos que construir una relación en el aparato publico con Guido es construir una relación peligrosa", aseguran fuentes de la institución.
E incluso, desde la Conama, consideran que uno de los factores que ha permitido cierta libertad en la acción de la gestión de Uriarte "es que precisamente no tiene relación con él, lo que ha sido una verdadera bendición".
Desprestigio sistemático
Políticos de la colectividad de Girardi, aseguran que el senador estaba esperando su oportunidad para cobrarle la mano a la ministra. Y que el panorama más que complejo en la contaminación de la capital fue la oportunidad perfecta para ello.
Incluso definen sus dichos en contra de la socialista "como un empeño de desprestigio sistemático en su contra, calificándola a través de los medios de inútil, neoliberal e inconsecuente".
Además, les llama la atención que a pesar de haber sido uno de los precursores de la necesidad de la creación de un Ministerio de Medio Ambiente en Chile, lo que pedía desde mediados de los 90, para la firma del proyecto en La Moneda el pasado 5 de junio, no asistió a la ceremonia, pese a haber sido invitado.
El recurso y la bancada verde
Otro hecho que llama la atención, es que cuando se anunciaron las acciones judiciales, que no descartan una eventual petición de remoción de Uriarte, se habló de que el asunto sería presentado por la bancada verde y diversas ONG ambientalistas. Pero al ser consultado, el abogado que lidera el equipo a cargo de preparar las acciones judiciales, Lorenzo Soto, éste explicó que "todavía no sabemos quienes van a suscribir. Pero se apuntará más que nada a la gente afectada". Soto tampoco despejó si se incluirían más autoridades en las acusaciones, lo que se anunciaría el mismo día que se presenten los recursos.
Sondeando entre algunas organizaciones ambientalistas, El Mostrador constató que no existía apoyo formal al asunto. En el caso de la directora de Chile Sustentable, Sara Larraín, ella aclaró que al momento del anuncio su corporación no formaba parte de la arremetida, ya que no contaban con mayores antecedentes.
Y agregó que "el tema de la contaminación no le corresponde a Uriarte", ya que dentro de las funciones establecidas en el decreto de su nombramiento no tiene atribuciones directas sobre la polución de Santiago. "Los responsables son el director regional de la Conama, Alejandro Smythe, su superior técnico, Álvaro Sapag, y el Intendente Metropolitano Álvaro Erazo".
En tanto, desde Terram adelantaron que podrían sumarse a las acciones, porque, según explicó la coordinadora del Programa de Medio Ambiente, Paola Vasconi, "ella como ministra tiene todas las responsabilidades políticas del cargo". Pero la directora de la entidad, Flavia Liberona, precisó que no ha existido una coordinación formal con la bancada verde al respecto.
Desde el Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (Olca) tampoco estaban al tanto del tema. Y de hecho la opinión de su director Lucio Cuenca, es bastante crítica: "No participamos mucho de las iniciativas que impulsa Girardi porque como parlamentario del Gobierno no ha golpeado fuerte la mesa para que se cambie el rumbo de la contaminación en Santiago. Ha estado ausente de la problemática en los últimos dos años".
Desde la propia bancada verde hay voces críticas. El diputado Enrique Accorsi (PPD) aclaró que este tema no tenía mayor sentido debido a que "ese recurso aparte de tener un efecto mediático, se va a demorar por lo menos un año". Lo que dentro del grupo es más que sabido, ya que del total de acciones judiciales que han presentado a la fecha, sólo han ganado en una oportunidad.
Por su parte, los socialistas Fulvio Rossi, Marcelo Díaz y Jaime de Urresti, decidieron respaldar a la ministra. Y, según aclaró Díaz, el recurso en cuestión "está lejos de ser una decisión de la bancada verde. Ni siquiera nos hemos juntado en el último tiempo". Por ello, planean visitar a Uriarte el próximo lunes, junto a otros parlamentarios que deben confirmar, para presentarle su apoyo.
En cuanto a la postura de Alejandro Navarro, sindicado como uno de los gestores de la acción, hay versiones que aseguran que el tema lo tiene bastante molesto porque lo "hicieron participar de un baile donde no estaba invitado". Aunque El Mostrador intentó contactarse con él y constatar su postura, el socialista se encuentra de viaje, por lo que no fue posible hacerlo. Tampoco fue posible comunicarse con Girardi.
