El Presidente Sebastián Piñera, al ratificar este sábado las pérdidas producidas por el terremoto que afectó a la zona centro sur del país el pasado 27 de febrero, en 30 mil millones de dólares, anunció que mantendrá y en muchos casos fortalecerá los programas sociales.
Sin embargo, mencionó que aplicarán una «economía de guerra» y que serán muy austeros en materia de gasto público. De hecho, el mandatario expresó que recortaron en un 5 por ciento el presupuesto destinado a bienes de consumo, compra de equipos e infraestructura en todos los ministerio.
Dentro de los proyectos propuestos por el gobierno anterior que serán postergados, se encuentra la última etapa del Estadio Nacional que contemplaba la instación de un nuevo techo y un sistema de iluminación , sin embargo, será inaugurado en la fecha correspondiente.
La instauración del ministerio de Desarrollo Social; la extensión del postnatal a seis meses, los mecanismos de depreciación acelerada para incentivar la inversión; la habilitación de multicanchas para el deporte, también serán retrasados.
Asimismo, serán construidos sólo los hospitales que se derrumbaron por el terremoto, pero postergarán la implementación de nuevos centros asistenciales. También, se atrasa para el próximo año la construcción de 50 liceos de excelencia nacional, iniciativa promovida durante la campaña del actual Presidente.
En la reunión que sostuvo el mandatario con la comunidad de Villa España, en España Central, explicó que además de las 20 mil mediaguas aportadas por la teletón, el Gobierno entregará la misma cantidad, junto con 60 mil empleos de emergencias.
Junto con esto, Piñera explicó que firmó un decretó para la creación de un Fondo de Reconstrucción para nuestro país, que es probable que la Ley de Donaciones, destinada a que el mundo privado aporte a la reconstrucción del país, esté firmada este lunes.
Además, mencionó que el Fondo de bonazas del cobre y algunos ajustes tributarios serán destinadas a medidas que permitan reparar los daños producidos por el terremoto.
EL DETALLE
El mandatario expuso de forma detallada el daño total que el terremoto produjo en el país. «Creemos que el terremoto nos va a significar una pérdida del producto nacional bruto, porque las empresas que están cerradas dejan de producir» y argumentó que además los daños mayores en infraestructura, vivienda y educación -entre otros- implican un costo de reconstrucción de una «cifra cercana a los 30 mil millones de dólares que es fruto de un estudio acabado, detallado y muy profundo» que, como indicó más tarde, incluye «un detalle sector por sector y región por región, que nos permite llegar a este cálculo».
Tras explicar la magnitud del gasto que se requiere, el Jefe de Estado dio a conocer la forma de financiamiento que se realizará a través de lo que denominó un «fondo de reconstrucción».
Tales recursos se utilizarán por lo menos en los próximos cuatro años y se nutrirá por diversas vías, siendo la más destacada de ellas la austeridad en el gasto público.
Así, informó que ya firmó un decreto en este sentido y dijo que «vamos a establecer una economía de guerra en el sector público, de austeridad hasta que duela». Argumentó que «eso va a ser un recorte que va a afectar a todos y cada uno de los ministerios. Y vamos a predicar con el ejemplo, porque el mayor recorte lo va a tener la propia Presidencia de la República».
Añadió que «hemos planteado un recorte general de gastos en las partidas correspondientes a bienes de consumo y compra de equipos y maquinarias en todos los ministerios de un 5%».
Además indicó que «hemos establecido la postergación de algunos programas que no tenían la misma prioridad que las tareas que la reconstrucción nos impone». Como ejemplo, expuso que «estaba programado que la última etapa de la remodelación del Estadio Nacional contemplara la construcción de un nuevo techo y cambio en todo el sistema de iluminación. Ese proyecto se va a postergar».
No obstante todo lo anterior, el Presidente señaló enfático que «no vamos a tocar el área social, lo cual significa que todos los programas sociales, como Chile Solidario, los programas de empleo de emergencia que existen, más los 60 mil nuevos puestos de trabajo que vamos a crear, los programas de alimentación de niños y todo lo que va en beneficio social de nuestros sectores más necesitados, y de nuestra clase media necesitada, se va a mantener inalterable, e incluso, en muchos casos, se van a fortalecer».
Anuncia envío de Ley de Donaciones y otras prioridades del programa
Gracias a estas primeras medidas, el Mandatario explicó que el ahorro permitirá «alimentar el fondo de reconstrucción con aproximadamente 733 millones de dólares».
Con el mismo propósito, adelantó que «la próxima semana vamos a enviar al Congreso una Ley de Donaciones que va a establecer un mecanismo para que el sector privado se haga cargo y participe en forma solidaria y generosa con este esfuerzo de reconstrucción».
Adicionalmente, señaló que «vamos a usar en forma moderada y responsable, una parte de los ahorros que nuestro país acumuló durante los períodos de bonanza del cobre, que es el Fondo de Estabilización y Emergencia Social». Y agregó que «también vamos a recurrir a un aumento moderado y responsable en la deuda pública».
Aseguró que «estamos estudiando ajustes tributarios, que van a ser moderados, pero que no serán la principal fuente de financiamiento, porque, tal como lo dijimos durante la campaña, no van a afectar ni a la pequeña y mediana empresa, ni a las personas naturales».
Este fondo se ocupará de forma prioritaria en «las urgencias sociales más sentidas por la gente: A reconstruir viviendas permanentes, definitivas y de emergencia para este invierno y a reconstruir nuestras escuelas que se han derrumbado».
POSTERGACIÓN DE MIGUEL STEGMEIER
En otro ámbito, el Mandatario fue consultado por la decisión del gobierno de dejar sin efecto el nombramiento de José Miguel Stegmeier como gobernador de la provincia del Bío Bío.
Al respecto, señaló que «esta es la forma de actuar con la verdad, con energía y con oportunidad. Por lo tanto, esa es la posición del gobierno y es la misma posición que vamos a tener cada vez que pensemos que alguna designación del sector público no es la mejor o la que Chile requiere y merece», enfatizó.
Requerido por la posición del gobierno frente a la situación que afecta a Guillermo Fariñas, disidente cubano y quien mantiene una huelga de hambre que amenaza su salud, el Jefe de Estado sostuvo que «vamos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para lograr que -no solamente en Cuba sino en el mundo entero- se respeten la democracia, los derechos humanos y las libertades esenciales de las personas porque estos son derechos que pertenecen al alma de las personas anteriores al Estado».
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