A cuatro años de la tragedia de la calle Serrano en Valparaíso, donde una fuga de gas provocó una explosión que dejó como saldo cuatro víctimas y más de 100 familias que quedaron sin trabajo, el municipio porteño, junto a parte de los familiares de las víctimas, manifestaron sus quejas en contra de las empresas responsables del hecho, GasValpo y Chilquinta.
El alcalde Jorge Castro presentó una demanda en contra de ambas firmas por un total de 1330 millones de pesos, para buscar indemnizaciones por los daños ocasionados por el hecho.
Las críticas de afectados por la tragedia hacia el municipio radican en que este último aceptó, hace dos años, el pago de 13 millones de pesos de parte de las empresas, para cancelar una deuda contraída por labores de salvataje y reconstrucción de la calle.
El jefe comunal sostuvo que el monto cancelado es ínfimo en relación a lo que se gastó en su momento. «Si tomamos y sumamos lo que se tomó y se invirtió en esas primeras horas, se gastaron más de 280 millones de pesos», aseguró Castro.
En tanto, los familiares y amigos de las víctimas, además de los comerciantes de la zona, criticaron a las empresas porque aún no los han indemnizado por los hechos. Ellos piden 2 millones de dólares a GasValpo y Chilquinta, mientras que en un principio las firmas ofrecieron sólo 400 millones de pesos.
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