Con un perfil que destaca por una crítica al sistema, la candidata presidencial del Partido Igualdad, Roxana Miranda, se presenta como una de las opciones más a la izquierda en el espectro electoral,con un respaldo ciudadano que ha fluctuado, según las encuestas, entre un 0% (CEP) y un 3% (Ipsos) en el desarrollo de los últimos meses.
La abanderada ha tenido cobertura por la dureza con que aborda las discusiones, como cuando afirmó en un debate radial que las mujeres en las poblaciones utilizaban adhesivo de fraguado rápido para pegarse los dientes, situación que luego el Colegio de Cirujano Dentistas confirmó que ocurría, o cuando exhibió su carnet de Fonasa a sus contendores.
Asimismo, ha polemizado por confrontaciones como cuando criticó los bonos que emitió Michelle Bachelet durante su administración, señalando que «tengo magíster en economía, señora Bachelet. Con su bono de 40 lucas tengo que llegar a fin de mes». También ha afirmado que nunca respaldaría a la candidata de la Nueva Mayoría en segunda vuelta.
Nacida en San Bernardo, Roxana Miranda es hija de un obrero municipal y una modista y estudió en el Liceo Comercial de dicha comuna. Fue dirigenta de una junta de vecinos y, posteriormente, de la Asociación Nacional de Deudores Habitacionales (Andha Chile), donde dice que pasó «de las ollas a la calle».
Su programa de gobierno presenta cuatro ejes principales: una sociedad que derrote al capitalismo, una república en la que el pueblo mande, la recuperación de derechos y una sociedad del buen vivir.
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