Ante críticas por cosificación de la mujer
«Estamos claros que vivimos otros tiempos», señaló el director de La Cuarta, medio organizador del evento.
Desde hace algunos años, una de las cosas más esperadas del Festival de Viña del Mar era el “piscinazo”, que en los últimos ha tenido osadas presentaciones que incluyen escuetos bikinis o cuerpos pintados.
Pese a que ya está instaurado como «tradición», lo cierto es que la reina nadando en la piscina del Hotel O´Higgins recién se instauró en 2001, con Natalia Oreiro que se lanzó con ropa para celebrar. Pero en realidad, la primera soberana de Viña fue la italiana Rafaella Carrá en 1982.
El piscinazo subió con la coronación de Patricia Manterola (2002), María Eugenia Larraín (2003) con un bikini inspirado en nuestra bandera nacional, Carolina «Pampita» Ardohaín (2004) quien usó un simple y diminuto bikini negro y Luciana Salazar (2005) quien revolucionó cuando se sacó la parte superior de su bikini inspirado en Chile y Argentina.
Tonka Tomicic (2006) fue más recatada con el inolvidable trikini café, aunque también pasó a la historia con el boicot de Rocío Marengo, quien le pidió a un par de niños que se tiraran a la piscina.
Luego vinieron, Diana Bolocco (2007), Pilar Ruiz (2008) y las maduras pero espectaculares Catherine Fulop (2009) y Carolina Arregui (2010).
Andrea Dellacasa (2011) instauró no usar bikinis sino unos piedras pegadas a su piel. Valeria Ortega (2012) optó por el bikini, al igual que Dominique Gallego (20013) pero Sigrid Alegría (2014) pasó a la historia por su cuerpo pintado.
Jhendelyn Nuñez (2015) optó por un decorado de lentejuelas pegado a su cuerpo y Nicole Moreno (2016) se presentó con pétalos de rosa pegados a su cuerpo
La última reina, Kika Sila (2017), volvió a optar por un simple bikini negro.
Pero este año las cosas cambiaron.
Camila Recabarren, candidata a reina de este año, criticó aunque con moderación.“Que se suspenda es demasiado grave. Yo estoy a favor con que la mujer no sea vista como un objeto, pero aquí nadie se ve obligado a participar. Yo quiero estar ahí”, señaló.
Las críticas han estado presentes en diversos medios. “Se fue desvirtuando con el tiempo, digámoslo. Porque yo me acuerdo cuando se tiró la Natalia Oreiro, por ejemplo, se tiró hasta con ropa. Pero ya después las chiquillas empezaron a sacarse, sacarse, y ofrecían sacarse ropa para que los periodistas votaran por ellas. Y, finalmente, terminaban como le pasó en un minuto a Luli, que se le empezaron a caer cosas. Salió prácticamente desnuda de la piscina», dijo Karen Bejarano en el matinal de TVN.
Por eso el director del diario La Cuarta, Sergio Marabolí, salió a aclara que, aunque habrá piscinazo, será distinto. “Una modificación importante en los 40 años de la reina de Viña es que habrá rey. Estamos claros que vivimos otros tiempos y por eso ambos van a participar de las actividades”, dijo en Chilevisión. Además explicó que se lanzarán juntos, aunque la elección es independiente entre ellos.
Según el organizador, la decisión corresponde “al perfil de la nueva Cuarta, que se adapta a los tiempos”.
