Organizaciones coinciden en que no se ha logrado una estrategia de trabajo para educar
Distintas organizaciones están evaluando que han hecho los gobiernos para reducir los contagios y evalúan si las políticas públicas se están cumpliendo o han sido suficientes. La Corporación Miles señala que: «Nuestro país tiene un retroceso en la promoción de la educación sexual laica desde un enfoque de derechos humanos desde una perspectiva de salud y bienestar que incluya perspectiva de género, respeto a la diversidad, no discriminación»
Un total de 5.816 casos de VIH Sida fueron constatados en nuestro país durante 2017, lo cual supera en un 96% a los 2.968 detectados en 2010. Así lo aseguró el inmunólogo y director del Centro VIH del Hospital Clínico de la Universidad de Chile, Alejandro Afani, tras sostener una reunión este lunes con diversas autoridades encabezadas por el ministro de Salud, Emilio Santelices.
El grupo de riesgo más afectado por la estadística es el de personas que tienen entre 15 y 25 años de edad. La cifra (96%) supera ampliamente el 66% (5.200 casos) informado por la administración anterior del Minsal, durante el periodo de la ex presidenta Michelle Bachelet.
Según expuso el ministro de Salud, Emilio Santelices, las políticas públicas implementadas a la fecha no han sido efectivas, por lo que afirmó que trabajarán en este gobierno para reducir esa cifra.
Y agregó que “entendemos que en Chile 45 mil personas estaban contagiadas con VIH, pero con esta nueva estimación proyectamos que son 100 mil”.
Ante el aumento de casos, Carlos Beltrán de la Corporación Sida Chile a Cooperativa dijo que «es necesaria la educación y la promoción, y esto tiene que ser una respuesta de país. El Ministerio solo no va a poder prevenir esta epidemia».
Además, manifestó que «estamos pagando 16 años después la suspensión de la educación sexual en los colegios. Es necesaria la educación y la promoción, y esto tiene que ser una respuesta de país. El ministerio solo no va a poder prevenir esta epidemia». Y agregó que «nosotros hemos promovido y financiado instancias de testeos en jóvenes universitarios, junto con otras medidas. El derecho a saber si uno tiene o no VIH es un derecho a la salud».
«El estado de Chile no está cumpliendo con la ley 20.418» declaró la Corporación Miles hace un año. La ley expone que «(…) los establecimientos reconocidos por Estado deberán incluir dentro del ciclo de enseñanza media un programa de educación sexual».
De 11.442 colegios municipales y subvencionados solo 467 recibieron educación sexual (2013), según la organización es «obvio el aumento del VIH/SIDA con gobiernos sin políticas públicas de prevención».
Claudia Dices de Miles habló con Braga y explicó que: «El desarrollo de distintos planes de educación sexual desde el año 1996 a la fecha por parte de las políticas públicas buscaron generar estrategias de trabajo sin embargo no se logró generar una política de educación sexual laica. Han sido programas e intervenciones esporádicas que no se aseguran desde la temprana edad y en todo el ciclo educativo incluyendo la educación superior».
«Nuestro país tiene un retroceso en la promoción de la educación sexual laica desde un enfoque de derechos humanos desde una perspectiva de Salud y bienestar que incluya perspectiva de género, respeto a la diversidad, no discriminación. Existen una serie de obstáculos de grupos conservadores que atraviesan todo el espectro político que no tienen la voluntad política de avanzar aunque existe una ley. Hoy los resultados de la ausencia de educación sexual son aumento de embarazos adolescentes entre los 10 y 13 años, aumento del segundo embarazo entre los 15 y 18 años y aumento del Vih SIDA y las infecciones de transmisión sexual como la gonorrea y el abuso sexual» aclaró Dides.
El portal Kilometrocero.cl publicó que en 2014, Edith Ortiz — antecesora de Edgardo Vera en el Programa Nacional de Prevención y Control del VIH/SIDA — completó el cuestionario que envía periódicamente ONUSIDA a los países que son parte de Naciones Unidas. En el ítem de “necesidades específicas”, detalló que Chile estaba al debe en aspectos como el uso correcto y consistente del condón, el abordaje de la educación sexual en establecimientos educacionales y en el conocimiento e información estratégica para la toma de decisiones sobre prevención y transmisión del VIH.
