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Emotivo adiós al compositor nacional Wilfried Junge

Autor de 35 obras para piano solo, lieder, obras sinfónico corales y orquestales, además de la ópera «El ahijado de la muerte» -su último trabajo-, el connotado músico penquista dejó de existir el martes pasado a los 72 años de edad producto de una enfermedad pulmonar.


Con la melodía de «La muerte de Ase» de la obra orquestal «Peer Gynt» de Edvard Grieg, la Orquesta Juvenil de Curanilahue despidió al fundador de la Sinfónica de Concepción, maestro Wilfried Junge, quien falleció la noche del pasado martes.



En una emotiva liturgia ecuménica en la Casa del Arte, los jóvenes talentos iniciaron el adiós final ante personalidades del ambiente musical de la región y autoridades de la Universidad de Concepción.



El connotado músico penquista Wilfried Junge Eskuche dejó de existir a los 72 años de edad tras una destacada trayectoria musical. Quien fuera el fundador de la Orquesta Sinfónica y Coro de la Universidad de Concepción -y en varias ocasiones postulado al Premio Nacional de Arte, mención Música- sufría una enfermedad pulmonar.



Autor de 35 obras para piano solo, lieder, obras sinfónico corales y orquestales, además de la ópera «El ahijado de la muerte» -su último trabajo- siempre desarrolló su vida musical en Concepción.



Su nombre figuró cinco veces en la quina de candidatos al Premio Nacional de Arte en la categoría de Música; recibió además, entre otras distinciones, el Premio Municipal de Música y la Medalla Diego Portales.



Nacido el 17 de agosto de 1928 en Viña del Mar y padre de cuatro hijos, Wilfried Junge Eskuche, realizó sus primeros estudios en el Colegio Alemán de Concepción y dirección de orquesta en la Academia Mozarteum de Austria, donde el Ministerio de Cultura de ese país lo premió como el mejor alumno.



En tres oportunidades ganó el concurso nacional de composición de la Universidad Católica de Chile, con sus obras Divertimento «RF 78», «Cantata del pan y la sangre» y »Quinteto para Vientos».



En 1998 compuso las cadenzas para el Concierto para fagot de Mozart, encargadas desde Viena. También escribió música para teatro, musicalizó canciones sobre textos de Neruda y compuso varias obras para piano.


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