Llamada a marcar un antes y un después en el género de los efectos especiales, esta segunda parte de la trilogía protagonizada por Keanu Reeves confecciona nuevas, innovadoras y mejoradas secuencias de acción, potentes efectos visuales y un desarrollo temático un poco más acabado.
Cintas como 2001: Odisea en el espacio de Stanley Kubrick o Blade Runner de Ridley Scott, durante años han conservado la categoría de referentes en cuanto a cine de ciencia ficción se refiere. Catalogadas como obras de arte del cine de género, ambas cintas han trascendido a un nivel impresionante llegando a conformar una especie de documento obligado a analizar para quienes empiecen a incursionar en el séptimo arte.
A finales de la década de los noventa, la mirada comenzó a desviarse. Un nuevo producto revolucionario y visionario se abría paso entre los grandes. Matrix se estrenó con una gran acogida de público y crítica -pese a sus carencias en la resolución del guión- en todo el mundo, renovando al cine con sus espectaculares y novedosos efectos especiales y particular forma de tratar el argumento.
Dirigida por los Hermanos Wachowski y protagonizada por Keanu Reeves, Matrix surge como una apuesta innovadora sorprendiendo a todo el mundo del séptimo arte en el final del Siglo XX. Matrix es cine de entretenimiento en el estado más puro, con una gran fuerza visual y con cada detalle cuidado al máximo para crear nuevas sensaciones en los espectadores: saltos imposibles, movimientos de cámara nunca vistos y velocidades secuenciales brillantes, en un intento de los realizadores por trasladar la estética visual del mundo de los comics al celuloide.
Debido a su gran innovación, los efectos y la estética de Matrix han sido utilizados posteriormente en gran cantidad de películas y de anuncios de TV por lo que es considerada por muchos como un clásico que ha marcado una época, como en su tiempo lo fue La Guerra de las Galaxias (1977).
En el segundo capítulo de la trilogía de Matrix, Neo (Keanu Reeves)logra un más refinado control de sus poderes extraordinarios a medida que Zion queda sitiada por el ejército de las máquinas.
Sólo unas cortas horas separan la última región del planeta habitada por seres humanos de 250.000 centinelas programados para destruir a la especie humana. Pero los ciudadanos de Zion, envalentonados por la convicción de que el Único materializará la profecía del oráculo y acabará con la guerra contra las máquinas, colocan todo tipo de esperanzas y expectativas sobre Neo, que se ve obstaculizado por visiones perturbadoras en su búsqueda de una solución.
Fortalecidos por su amor mutuo y su confianza en sí mismos, Neo y Trinity (Carrie-Anne Moss) deciden regresar a Matrix con Morpheus (Laurence Fishburne) y lanzar su arsenal de habilidades y armas extraordinarias contra las sistemáticas huestes de la represión y explotación. Pero dentro de Matrix existen poderosas figuras que refutan el artificio de la elección, evadiendo la responsabilidad que ésta acarrea mientras se alimentan de las verdades emocionales de los demás.
Mientras tanto, hay exiliados como el agente Smith (Hugo Weaving), cuya inexorable conexión con Neo lo lleva a desobedecer el sistema que ha ordenado su eliminación. Impulsado por la humanidad que alguna vez aborreció, Smith consumirá todo lo que se pone en su camino con tal de satisfacer su sed de venganza.
Durante su travesía peligrosa hacia un mayor conocimiento de la estructura básica de Matrix y su papel esencial en el destino de la humanidad, Neo deberá enfrentarse a una resistencia mayor y a verdades más profundas y decisiones más imposibles de las que jamás había imaginado.
Matrix Recargado logra mezclar de gran manera la espectacularidad (superior a su antecesora) con una historia interesante y prolijas interpretaciones que dan cuenta de un gran entrenamiento tanto físico como mental. Keanu Reeves, Carrie-Anne Moss y Laurence Fishburne mantienen esa credibilidad en sus personajes y deslumbran con sus sensacionales acrobacias, que pese a ser realizadas por dobles, dan una sensación de realidad sorprendente.
Si bien es cierto, el trabajo de los Hermanos Wachowski presenta algunas debilidades de guión, dejando un poco de lado el desarrollo de la historia en pos de un impacto mayormente visual, Matrix Recargado como también Matrix Revoluciones, ambas rodadas como un solo filme y dividas en dos partes, retratan esa nueva era del cine que se avecina, con efectos revolucionarios y nuevas formas en el tratamiento de los argumentos que cambiarán la manera de contar y mostrar las secuencias de acción.
Dinámica, intensa, explosiva y sorprendente, Matrix Recargado tiene la posibilidad de jugar, deslumbrar y por supuesto entretener al espectador, acostumbrado a las clásicas cintas de acción llenas de falsas explosiones, inverosímiles combates y una gran cantidad de personajes clichés. Matriz Recargado como parte de una trilogía viene a renovar el cine de ciencia afición innovando en cuanto a técnicas y formas en una poderosa obra de la industria del entretenimiento y sus subyugados obreros.
