La decimoquinta versión del Love Parade se inició esta mañana en las calles de Berlín con una misión solidaria: realizar una colecta para proyectos de reconstrucción en Irak. Se espera que la fiesta termine el domingo del mediodía.
Decenas de miles de personas y treinta remolques-discoteca empezaron bajo un sol radiante en Berlín la Love Parade, el mayor desfile de música tecno del mundo, que este año cumple su decimoquinta edición.
Aunque los inconfundibles raver recorren las calles de la capital y se divierten en los clubes tecno desde el viernes, el desfile comenzó oficialmente a las 12.00 GMT.
El lema de este año es «Love Rules» (el amor manda) y para demostrarlo no sólo habrá más besos y más erotismo que en ediciones anteriores, sino también más caridad.
Por ejemplo, se realizará una colecta para proyectos de reconstrucción en Irak.
Los organizadores esperan congregar a medio millón de personas, frente a los 1,5 millones que acudieron a la cita del «padre» de la Love Parade, el Doctor Motto, en 1999.
Si la meta de los 500.000 fijada por los organizadores no se cumple, el desfile, que ha ido en descenso año tras año, podría no volver a celebrarse por falta de patrocinadores.
«Berlín no quiere la Love Parade. Desde el principio solo ha habido problemas, críticas, acusaciones. Me siento un poco decepcionado», afirmó el Doctor Motto en una rueda de prensa.
El desfile comenzó, como ya es tradicional, de forma simultánea en dos extremos de la principal arteria de Berlín, en la puerta de Brandeburgo y en la plaza de Ernst Reuter.
Los camiones del amor o «lovetrucks», como se les llama en círculos tecno se encontraran en el obelisco de la Victoria para un cierre de fiesta, que puede durar hasta el mediodía del domingo o hasta que el cuerpo aguante.
EFE
