Publicidad

Congreso: «Los grupos siempre están rodeados de fantasmas»

La banda se presenta este sábado en el Teatro Oriente, antes de su gira a Europa. En el concierto, llamado »con los ojos en la calle», presentarán varias creaciones de su próxima producción, la primera que hacen en estudio, desde que muriera el tecladista Jaime Vivanco. También habrá otra novedad: algunas versiones electrónicas de algunos de sus temas más conocidos.


Congreso electrónico. O algo así. Es parte de lo que prometen Sergio ‘Tilo’ González y Pancho Sazo para el concierto que este sábado 17, a las 21:00 horas, ofrecerá la agrupación nacional en el Teatro Oriente.



El encuentro tendrá varias novedades: en primer lugar, el grupo mostrará varios temas de su próxima producción, cuyo nombre aún no está definido. Además habrá nuevas versiones de temas propios, esta vez con clave electrónica. Todo esto, como sinopsis de lo que podrá encontrarse en su nuevo disco.



El concierto -llamado "Con los ojos en la calle", en alusión a uno de los temas nuevos del grupo- tiene también una dimensión simbólica importante: puede que sea la última ocasión en que Jorge Campos se suba al escenario con la banda, antes de partir a Europa y radicarse fuera de Chile, aunque todavía no es definitivo.



Dos días después del espectáculo, la banda viajará a Francia, para presentarse en la Casa de América Latina, en el marco del Día de la Música, que se celebra en todo el país. Posteriormente actuarán en Bruselas, para volver luego a París.



La urgencia del "parto"



El pasado trabajo de Congreso, Congreso de Exportación. Historia de un viaje, editado en el 2004, es una recopilación de algunos de sus temas más significativos. Su anterior disco de estudio, sin embargo, fue La loca sin zapatos, en el 2001. Es el último proyecto discográfico en el que participó el tecladista Jaime Vivanco, quien murió en enero del 2003. La nueva placa, que aún no tiene nombre definido, tendrá a Sebastián Almarza en teclados.



-La Loca sin Zapatos fue el último disco de estudio que ustedes hicieron junto a Jaime Vivanco. ¿Cómo ha sido el proceso de volver a crear sin él?
-Pancho: Es un proceso que todavía está siendo. Pero creo que Sebastián (Almarza) tiene las cosas bien claras, él pone su impronta, su toque. Probablemente es difícil para la persona que entra, porque los grupos siempre están rodeados de fantasmas, pero son fantasmas amistosos. También hay motivaciones internas, hay cosas que nos hablan, temas que nos atraen, un lugar desde el que miramos la vida, otros afanes. Es una extraña alquimia la que tiene que producirse, y ahora estamos maduros.



-Se hace sin urgencia, además, porque todos trabajan en otras cosas también…
-Pancho: Hay urgencias: hay una urgencia íntima por el momento del parto.
Tilo: Cuando te embarcas, quieres llegar luego al puerto. Es algo impuesto por uno mismo, nadie te está apurando. Pero nos dan ganas de trabajar, de no dejar que pasen semanas sin vernos. Ahí funciona esta urgencia íntima de sacar cosas nuevas.



-¿Va a ser una producción independiente, como las últimas?
-Tilo: Es posible. En realidad es algo que todavía no resolvemos, pero en Chile grabar un disco como independientes es un tema simple: nosotros no vendemos más si estamos en un sello, por lo tanto, no es tan tentador.



-Es un lujo que se puede dar un grupo como Congreso.
-Tilo: Puede ser, pero creo que más que todo es que andamos por un carril bien definido. No perseguimos esto de las promociones, ni visitamos puerta a puerta las radios, ni nos preocupamos por ir a un programa estelar -aunque estuvimos, hace muy poco. Todo es sin querer queriendo, cuando nos invitan. En ese sentido, una multinacional no sé si nos pueda servir. Además, los independientes nos estamos tomando un poco el mercado en Chile, porque las multinacionales no están produciendo más allá de las baladas, o de algunos casos específicos.



La saudade de Congreso



-Dicen los rumores que puede haber colaboración de mujeres en el nuevo disco.
-Tilo: Hicimos un concierto unplugged el año pasado, y ahí incorporamos coros femeninos. Sonaba bien, y lo más probable es que en el disco incluyamos alguno.



Es frecuente que ustedes musicalicen textos de poetas. En La loca sin zapatos estaba "Farewell", de Neruda. ¿Van a hacer eso, esta vez?
-Pancho: Tenemos un texto de Huidobro que no hemos grabado, "La caída". Por ahí podemos tomar algo. También me gustaría tomar a algunos poetas jóvenes. Pero es algo que hay que preparar, no es que estemos pensando en qué le pegaría. El disco es para nosotros un concepto que engloba todos los temas, y que lleva a discos anteriores.



-Ustedes han dicho que va a ser un disco de tinte nostálgico. También La loca sin zapatos tenía ese toque. ¿Es culpa de Pancho, de Tilo, de la edad?
-Pancho: Claro. Hay una mirada que te dan los años, ya no podemos ver todo igual que cuando teníamos 18; ¡qué bueno! Seríamos unos viejos recauchados. Planteamos los temas que están en boga en Chile y el mundo, ciertas desilusiones, cierta falta de participación, cierta tristeza. De repente es un lenguaje que se entiende entre poca gente, y otras veces es muy masivo. En el disco pasado teníamos una canción que se llama "Pasillo de amor", que se puede entender desde la madurez, pero que también gustaba mucho a los jóvenes. Nos basamos también en las cosas que nos han pasado: llevamos heridas, sonrisas, calcomanías alegres de todo lo que nos ha pasado. Es nuestro material, más allá del ‘ye, ye’ y ‘agarráme la escalera’ (risas).
Tilo: Es como esa palabra que se usa en portugués, "saudade". Que es una nostalgia alegre, un recuerdo hermoso. Nosotros no necesitamos hacer temas radiables, corremos por nuestro propio carril. Nos ha resultado.



Como Humphrey Bogart



Aunque algunos integrantes se han ido de Congreso, ustedes son, junto con Los Jaivas, prácticamente las únicas bandas de esta trayectoria que no se ha separado…
-Pancho: Mira, no creo que nos separemos, pero esto sí tiene que terminar algún día. En un momento dado, vamos a decir ‘lleguemos hasta acá’, aunque probablemente después nos juntemos para tocar eventualmente. Hay una cuestión física, de que el cuerpo te acostumbre. No todavía, eso sí. Mientras uno está enamorado, dura la cosa. Pero ese día tiene que llegar naturalmente, y uno tiene que irse, como Humphrey Borgart: sin mirar para atrás.



-Parte de la receta de Congreso, en todo caso, ha sido no atar a nadie.
-Tilo: Exactamente. Nosotros tenemos válvulas de escape. Cada uno hace sus proyectos por fuera, y eso hace que la convivencia interna, en términos sonoros, siga siendo coherent

Publicidad

Tendencias