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Próximas apuestas en Chile y en extranjero de director de Mujeres infieles

Rodrigo Ortúzar debutó como director en enero de 2004 con la película »Mujeres infieles». Ahora, se apresta para el rodaje de »All Inclusive». Pero eso no es todo porque entre las diez películas que proyecta realizar figuran un largometraje basado en la tragedia de Antuco y otro sobre la vida Luis »Conejo» Martínez, el rey del »nuts».


Rodrigo Ortúzar junto a algunas de las actrices de «Mujeres infieles», su primer largometraje estrenado en 2004.

Hace un par de días que Rodrigo Ortúzar mantiene su centro de operaciones en ciudad de México. Estará en esa ciudad durante 3 meses. No se trata de una estadía de placer, sino de trabajo y mucho.



El próximo 7 de mayo iniciará el rodaje de su segundo largometraje después del estreno de "Mujeres infieles" en 2004. Una película ambiciosa que apunta no solo al público nacional desde su génesis, sino también a la internacionalización.



Varias son las grandes cadenas distribuidoras con las que mantiene relaciones como Fox, Warner y UIP, además de Panamax films, que ya confirmó su participación como distribuidor de la cinta en el país norteamericano junto con la segunda parte de "Mujeres infieles".



«Esto es nuevo para el cine chileno. No hay ninguna película que tenga una distribución asegurada antes del rodaje", dice el director desde México en conversación con El Mostrador.cl, asegurando que "All inclusive" será el primer filme nacional que tendrá su estreno en Estados Unidos.



Este drama y comedia al mismo tiempo – producto de las plumas de Julio Rojas, el mismo guionista de "En la cama" (Matías Bize), y Paula del Fierro- narra la historia de una familia que se desarticula en los siete días de vacaciones en un resort hotelero «todo incluido». Cada uno vivirá una experiencia que hará patente su disfuncionalidad, y en la búsqueda de su felicidad sobrellevarán una profunda crisis, todo en el contexto del perfecto ambiente del hotel "all inclusive".



Un filme que proyecta tempranamente su éxito, según el director, quien además de contar con la post-producción y la distribución a cargo de una transnacional norteamericana con anticipación, destaca la calidad del guión, a diferencia de su anterior película, con la cual, dice, logró aprender de los errores. "Lo principal en Mujeres infieles fueron los problemas de guión, que se redactó en dos meses. En esta película nos demoramos desde ocho meses a un año", cuenta.



Historias conmovedoras



La internacionalización que Ortúzar pretende conseguir con su trabajo y sus contactos, no solo pasa por la idea de realizar cintas de corte comercial y con actores de renombre, como ocurre en "All inclusive". También proyecta varias películas bajo el formato de "cine de autor".



Aquí es donde se encuentran dos de los proyectos más interesantes de las diez películas que pretende realizar en los próximos cinco. Allí se encuentra la historia de la tragedia de Antuco, ocurrida en mayo de 2005, donde murieron 45 soldados en una mortal caminata en medio de una tormenta de nieve.



"Será una película bien nacionalista, con muchos aspectos propios de nuestro país, un drama que pretendemos llevar al cine con mucha emotividad y poder transformar esas características chilenas en elementos universales, para poder vender la cinta en el extranjero", cuenta el director acerca de este proyecto.



Pero la historia de Antuco no es la única que Ortúzar tiene en mente. Luis Martínez, conocido en Chile y los Estados Unidos como el "Conejo", será el protagonista de su tercera película, que narrará la historia de este chileno en Nueva York y cómo logró conseguir una posición económicamente acomodada vendiendo maní confitado en los Estados Unidos.



"Esa película ya se proyectó con bastante seguridad. Luis Martínez firmó un documento donde nos autoriza a representar su historia y ya comenzamos a realizar los primeros trabajos de pre-producción", adelanta.



La industria del cine chileno



Tan importante como articular buenos guiones, también es posicionar el cine chileno en el extranjero, dando un ejemplo de que si se puede hacer de esta industria un negocio.



Por eso el trabajo ejecutivo que Rodrigo Ortúzar realiza junto a su equipo es tanto más importante que los aspectos relacionados netamente con la filmación.



«Es una película chileno-mexicana, que transcurre completamente en México y que incluye a un elenco de actores chilenos, mexicanos, tiene que ver con el carácter internacional que queremos darle a esta cinta, filmes que cuentan con inversiones privadas y que no morirán en el intento", señala Ortúzar.



Entre quienes formarán parte se encuentran actores como Valentina Vargas, Mónica Cruz, Ana Serradilla, Mario Cimarro, Jesús Ochoa, Martha Higadera, la chilena Leonor Varela y Edgar Vivar, recordado por personajes como Ñoño y el señor Barriga en el "Chavo del 8".



"Su participación en la película fue gracias a que contamos con el apoyo de productores ejecutivos norteamericanos que nos ayudaron para hacer este casting internacional. Por eso llegamos a Edgar Vivar, que tiene una aparición breve en la cinta pero muy importante, con un personaje dramático", cuenta Ortúzar, quien ya se reunió con el actor mexicano.



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