La valorización de activos realizada por la auditora no difirió mayormente de los cálculos propios que había hecho la afectada administradora de fondos. El perjuicio estimado contra los aportantes sigue siendo una cifra en torno a los US$20 millones.
Conclusiones dentro de lo esperado arrojó la valorización de activos que realizó la auditoria Deloitte a los fondos afectados de Aurus, Insignia y Global, los cuales fueron objeto de fraude por parte de Mauricio Peña, ex socio y portfolio manager de ambos vehículos.
A través de un hecho esencial, Aurus Capital comunicó que en total el daño patrimonial de los fondos en cuestión asciende hasta los US$34,6 millones, esto en base a la valorización de activos que realizó la auditoria con fecha de cierre al 3 de octubre de este año.
De acuerdo al informe, al día de la valorización, el fondo Insignia contaba con US$64,978 millones, y el fondo Global US$11,236 millones, los cuales se comparan con los US$ 95,621 millones y US$15,185 millones que registraba la contabilidad de los respectivos fondos, una diferencia negativa de 32% y 26% respectivamente.
Tras este resultado, el presidente de la afectada AGF comunicó lo siguiente: “Nuestro compromiso, desde el primer día, ha sido actuar con la mayor diligencia y transparencia, para aclarar los hechos y reducir al máximo la incertidumbre que esta estafa, de la que fuimos víctimas junto a nuestros aportantes, ha generado en ellos y en el mercado en general. A la fecha, hemos entregado información oportuna, completa y certera, para que nuestros clientes y el mercado tomen decisiones correctas (…) Estamos trabajando con dedicación exclusiva para enfrentar este problema y darles una solución de mercado a aquellos aportantes que fueron afectados por el fraude cometido por este ex ejecutivo”.
En cuanto al perjuicio estimado contra los aportantes de ambos fondos, la cifra oscila los US$20 millones. En el informe de Deloitte se detalla que en el caso del fondo Insignia, la diferencia se generó principalmente por instrumentos sin respaldo de custodia, diferencias de precio y cantidad de cuotas -en el caso del Fondo MBI Perú-, diferencias de precios de instrumentos, y diferencias de conciliaciones bancarias. En el caso de Global, en tanto, el daño se generó básicamente por diferencias de precios de instrumentos.
