Jorge Castañeda señala que la izquierda en Latinoamérica, como lo afirmó en 2006, tiene «una corriente mala, con Venezuela, Bolivia, Argentina y Ecuador, y otra buena, con Brasil y Chile», que con las últimas acciones, en especial el asunto FARC-Chávez-Colombia se «ratificó».
El ex canciller mexicano Jorge Castañeda aseguró que «solo o con aliados» el presidente venezolano, Hugo Chávez, tiene incidencia para hacer que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) reparen su «fiasco», publicó hoy la prensa brasileña.
Castañeda, en entrevista con el diario Folha de Sao Paulo, aseveró que la liberación de la ex candidata a la vicepresidencia de Colombia, Clara Rojas, y de la ex diputada Consuelo González, lograda con la mediación de Chávez, dejan ver la incidencia del mandatario sobre las FARC.
«La liberación muestra dos cosas: primero, que Chávez, solo o con aliados, tiene ascendencia real sobre las FARC. Puede convencerlas a reparar el daño causado por un fiasco como el episodio del niño Emmanuel», apuntó.
Las FARC anunciaron en diciembre la liberación de las dos políticas y Emmanuel, hijo de Rojas, quien lo concibió y dio a luz en cautiverio, como señal de desagravio a Chávez, quien fue retirado de las negociaciones de intercambio humanitario por el presidente colombiano Álvaro Uribe.
Después de contradicciones y acusaciones recíprocas entre los Gobiernos de Venezuela, Colombia y las FARC el operativo para la entrega fue suspendido el 31 de diciembre.
Uno de los motivos, según Uribe, fue que las FARC no tenían en su poder a Emmanuel, abandonado por los guerrilleros en un albergue público para niños, hipótesis que se confirmó con exámenes de comparación genética del menor y sus familiares maternos.
Castañeda agregó que «en segundo lugar, que la opinión pública venezolana e internacional ya no se traga tan fácilmente ese tipo de maniobra. La pregunta no es cómo Chávez anotó el gol, pero sí quién le dio el pase».
El periódico paulistano, citando fuentes anónimas de la Cancillería brasileña, informó que Brasil y Argentina estarían interesados en agilizar el acuerdo humanitario entre 500 presos de las FARC y 44 secuestrados.
El propósito sería «equilibrar» las diferencias políticas entre Venezuela y Colombia.
«Realizar una negociación de tipo humanitario y no político», sería el propósito de los Gobiernos del brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y la argentina Cristina Fernández de Kirchner, quienes elogian a Chávez y reconocen el «papel fundamental» de Uribe.
A juicio de Castañeda, la izquierda en Latinoamérica, como lo afirmó en 2006, tiene «una corriente mala, con Venezuela, Bolivia, Argentina y Ecuador, y otra buena, con Brasil y Chile», que con las últimas acciones, en especial el asunto FARC-Chávez-Colombia se «ratificó».
En otros temas destacó que la división de chavistas, que propició la derrota del mandatario venezolano en el referendo del pasado 2 de octubre en su intención de cambiar la Constitución para una reelección indefinida, «nos hace pensar en el chavismo sin Chávez».
Sobre la presidenta de Argentina apuntó que ella no cambiará la dirección dada al país por su esposo y antecesor, mientras que del mexicano Felipe Calderón aseguró que su «flexibilización» en el discurso con la izquierda latinoamericana hace parte de una estrategia de política exterior que de una decisión interna propia.
EFE
