Inclemencias han causado ya 23 muertos en siete de los nueve departamentos del país.
El gobierno de Bolivia ha decretado la emergencia nacional por las fuertes lluvias e inundaciones que sufren varias regiones del país desde el mes de noviembre, que han causado ya 23 muertos, confirmaron fuentes oficiales.
Siete de los nueve departamentos bolivianos (Cochabamba, Beni, Pando, Santa Cruz, Potosí, La Paz y Chuquisaca) han padecido riadas, lluvias e inundaciones en las últimas semanas, provocadas en muchos casos por el fenómeno climático «La Niña».
Santa Cruz, donde se declaró la alerta roja por la crecida de los ríos Grande y Piraí, es la región más afectada en la actualidad junto a Chuquisaca y Cochabamba.
De los 23 fallecidos, seis corresponden a Cochabamba, otros seis a Santa Cruz, cinco a Chuquisaca, dos al departamento de La Paz, tres a Potosí y uno a Pando, informó el viceministro de Defensa Civil, Hernán Tuco, en el canal Bolivisión.
La cifra de familias damnificadas por las lluvias e inundaciones se eleva a 19.604.
La semana pasada Tuco cifró las pérdidas por las precipitaciones y riadas en unos 30 millones de dólares y calculó que al menos 10.000 hectáreas de cultivos han quedado dañadas.
Entre enero y marzo de 2007, el fenómeno de «El Niño» causó 56 muertos en Bolivia, ocho desaparecidos y 600 mil damnificados, además de pérdidas cifradas en US$ 443,3 millones, 4% del Producto Interno Bruto (PIB) del país, según informes de la ONU.
EFE
