«Si los demás están listos para seguir adelante y responder a nuestros ofrecimientos de forma significativa, aquí estamos», sostuvo la representante estadounidense.
La representante de Comercio de Estados Unidos, Susan Schwab, aseguró este miércoles que su país mantiene las ofertas que ha hecho en las negociaciones de la Ronda de Doha, que ayer concluyeron con un fracaso ante la persistencia de desacuerdos entre las principales potencias comerciales.
«Si los demás están listos para seguir adelante y responder a nuestros ofrecimientos de forma significativa, aquí estamos», sostuvo.
A una pregunta de si la Ronda de Doha está aún viva o ha muerto, la representante estadounidense respondió que se debe iniciar un periodo de reflexión «para ver cuál es el camino por el que se puede avanzar».
En una conferencia de prensa, Schwab atribuyó el fracaso de las negociaciones a que dos de las siete principales países que participaban en el proceso se atrincheraron en sus posiciones y rechazaron un acuerdo de «compromiso» que estaba sobre la mesa.
Sin decirlo directamente, Schwab responsabilizó a China e India de este resultado por haber defendido a rajatabla un nuevo mecanismo de salvaguardas que les hubiese permitido subir sus aranceles en caso de un incremento importante de las importaciones agrícolas o de una caída dramática de los precios internacionales.
Schwab aseguró que hasta ese momento los negociadores tenían un acuerdo realmente al alcance de la mano, pero la situación se revirtió rápidamente.
«Cinco de los siete (principales negociadores) estábamos listos, pero no pudimos capitalizar esa situación y automáticamente las negociaciones se bloquearon en la cuestión de las salvaguardas especiales», explicó.
«Fue muy triste que adoptaran una postura tan férrea», señaló la negociadora.
Sostuvo que el mecanismo propuesto «hubiese resuelto las legítimas preocupaciones acerca de la subsistencia de los agricultores (en los países pobres) en caso de un aluvión de importaciones», pero los países que defendían esa posición «pedían más y más».
En su opinión, sus demandas «incluían una herramienta para cerrar los mercados» y se habría convertido en una barrera mayor al comercio con respecto a la situación actual.
EFE
