El barco tailandés navegaba por el Golfo de Adén (entre Somalia y Yemen) cuando fue atacado por los piratas, que tomaron el mando de la nave y la dirigieron a las costas de Somalia.
Un carguero de bandera tailandesa con 28 marineros a bordo permanece secuestrado desde el martes pasado por un grupo de piratas somalíes, indicó hoy el Centro para la Observación de la Piratería de la Oficinal Marítima Internacional.
«Navegan hacia esa zona porque la conocen, se sienten cómodos, tienen apoyo de su organización en la costa y pueden organizar mejor la solicitud del rescate a la compañía propietaria del barco», explicó a Efe un portavoz del centro internacional, con base en Kuala Lumpur.
La identidad de los 28 marineros secuestrados y el nombre del carguero no han sido facilitados por cuestiones de seguridad, pues los piratas se encuentran ahora mismo a bordo de la nave.
Pero, «hasta donde se sabe», todos los tripulantes, de nacionalidad tailandesa, se encuentran bien, apuntó.
Las aguas de Somalia son un refugio seguro para los piratas, que han convertido el paso entre el mar Rojo y el océano Indico en uno de los puntos de mayor peligro para el transporte marítimo internacional.
En lo que va del año, más de una veintena de embarcaciones, entre ellas el pesquero español «Playa de Bakio», han sido blanco de esos ataques.
En junio, el Consejo de Seguridad de la ONU adoptó una resolución que autoriza a los navíos de guerra extranjeros a perseguir a las embarcaciones piratas en los próximos seis meses, siempre que antes reciban el consentimiento de Somalia.
EFE
