El Instituto de Medicina Legal (IML) informó el martes pasado a la Sala de que a Fujimori se le había detectado un quiste de 1,5 centímetros de diámetro en el páncreas, por lo que recomendó realizar exámenes complementarios.
El ex presidente peruano Alberto Fujimori será trasladado a un hospital para someterse a análisis médicos por un quiste en el páncreas, informó este jueves la sala que lo juzga, en medio de temores de que su proceso vuelva al punto de partida.
Estos exámenes se realizarán el viernes en el limeño Instituto Nacional de Enfermedades, a donde será trasladado desde su centro de reclusión, de acuerdo con un comunicado de prensa del Poder Judicial.
Asimismo, la Sala Penal Especial de la Corte Suprema, que juzga desde diciembre pasado al ex presidente (1990-2000) por dos casos de violación a los derechos humanos, también ratificó «su permanente voluntad de respetar los derechos de las partes y garantiza el debido proceso legal».
El Instituto de Medicina Legal (IML) informó el martes pasado a la Sala de que a Fujimori se le había detectado un quiste de 1,5 centímetros de diámetro en el páncreas, por lo que recomendó realizar exámenes complementarios.
El ex gobernante, de 70 años, ya fue sometido a una intervención quirúrgica este año a raíz de una lesión cancerígena en la boca y tuvo una semana de descanso médico por ese procedimiento.
Este nuevo problema de salud tiene «preocupado al (ex) presidente», dijo hoy el abogado de Fujimori, César Nakazaki.
En declaraciones a Radio Programas del Perú (RPP), el médico de cabecera de Fujimori, Alejandro Aguinaga, expresó este jueves que espera tener los resultados de los exámenes el próximo lunes.
El también legislador fujimorista precisó que de encontrarse un tumor maligno «se le sometería a una cirugía de páncreas».
«Es una operación delicada, por ende las tasas de sobrevida a cinco años de estas patologías son escasas con relación a otro tipo de cáncer dentro del abdomen», acotó.
Por su lado, el fiscal Supremo, José Peláez, declaró al diario Perú.21 que se debe cuidar «que las audiencias no se suspendan más de ocho días o, por fuerza mayor, más de 12 días, porque eso significaría el quiebre del proceso».
Si se suspende el juicio por un período mayor al mencionado por Peláez el juicio volvería al punto de partida y «sería un desastre», señaló.
«Es cierto de que existe el riesgo de que se aprovechen los problemas de salud (de Fujimori) para quebrar el proceso, pero la sala y las partes vamos a estar muy pendientes, muy atentos a que eso no suceda», puntualizó Peláez, tras alertar de que podrían renovarse los reclamos para mejorar sus condiciones de reclusión.
Lo que sí dejó en claro el fiscal Supremo es que si se le detecta a Fujimori un tumor maligno se trataría de «un hecho totalmente ajeno al desarrollo del proceso», donde no se puede «hacer absolutamente nada, porque eso depende de la naturaleza».
En el proceso por abusos a los derechos humanos la Fiscalía ha pedido 30 años de cárcel para Fujimori.
EFE
