Anunció que no incrementará el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y detendrá la reforma universitaria, proyectos que habían generado críticas y protestas.
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, anunció que dará marcha atrás en dos de sus proyectos que más críticas habían generado en las últimas semanas.
Una reforma que otorgaba más poder al gobierno sobre las universidades había sido contestada por universitarios al considerar que impondría un «pensamiento único», mientras que el aumento del Impuesto al Valor Agregado (IVA) había causado malestar en amplios sectores al considerarlo una decisión «inflacionaria».
Chávez dijo en un consejo de ministros retransmitido parcialmente por la televisión que la nueva ley de universidades, que había sido aprobada por la Asamblea Nacional, tenía debilidades y que la vetaría.
«Si aprobara la ley, la batalla ideológica se apagaría y se convertiría en otra cosa», aseveró el mandatario sobre una medida que había generado protestas estudiantiles en los últimos días.
Respecto al aumento de impuestos que anunció en diciembre, Chávez afirmó que encontró otras maneras para obtener los recursos.
La corresponsal de BBC Mundo en Caracas, Yolanda Valery, señaló que tanto la decisión de no aumentar el IVA como la de vetar la Ley de Universidades se produjeron de manera sorpresiva, contra los anuncios y pronósticos de oficialistas y representantes de la oposición.
El mismo Chávez había anunciado la necesidad de incrementar el Impuesto a las Ventas tras la crisis provocada por las recientes inundaciones, pero había recibido numerosas críticas por parte de quienes lo consideraban sólo una excusa para obtener fondos adicionales con los que financiar gastos de la campaña presidencial que se avecina.
El mandatario ha dicho en más de una oportunidad que ya está en la carrera por esa contienda electoral, prevista para finales de 2012.
Es posible que, así como la idea de subir el IVA fue adscrita por estos críticos a los comicios de 2012, la decisión de retractarse sea atribuida al mismo factor. Buena parte de los comentarios negativos estaba dirigido a resaltar el hecho de que el IVA se le cobra por igual a los más ricos que a los más pobres, pero que estos últimos terminan siendo los más afectados.
En cuanto a la ley de Universidades, dijo Valery, había sido objeto de una serie de manifestaciones de protesta por parte de las casas de estudio tradicionales, con las que el sector oficial mantiene un enfrentamiento de larga data.
Pero profesores, alumnos y sindicatos ligados a al oficialismo habían estado defendiéndola a capa y espada. Pocos minutos antes del anuncio presidencial, por ejemplo, un boletín del Ministerio de Información daba cuenta de los resultados de una reunión de estudiantes en el sur del país, bajo el título «Nueva ley de universidades garantiza igualdad de derechos en las casas de estudio».
Esta muestra de apertura pondrá unas y otras relaciones en una nueva dimensión, cuyo resultado está por verse, indicó la corresponsal.
