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Señales de Monterrey


Como una sombra rápida pasó la Conferencia de Naciones Unidas para el Financimiento del Desarrollo. Entre bombas en Lima y balas en Jerusalén, un discurso rupturista de Fidel Castro y un mutis por el foro de muchos otros líderes, pasó a la historia en pocas horas esta oportunidad magnífica que acaban de perder los países desarrollados de empezar un gradual cambio del modelo neoliberal actual.



Estos países parecen haber optado por un nuevo apretón sobre las regiones pobres del planeta, confirmando todo cuanto sostienen los adversarios del modelo, mas conocidos como los Non global. Faltó solo que se acusara al Presidente cubano de pertenecer a la red de Al Qaeda para que el ridículo fuese total.



Horas antes de su llegada a Monterrey, mientras viajaba, el Presidente George W. Bush y su comitiva habían declarado que Argentina no debía siquiera soñar con nuevos créditos si no procedía a aplicar las reformas y ajustes que se le han pedido, es decir, a autoderrocarse, pues está probado que así será si siguen apretando el cinturón de los pobres y las capas medias trasandinas.



¿Se imaginan si en su camino a Belén los Reyes Magos se hubieran dedicado a lanzar amenazas? Bueno, ésa es una medida de la credibilidad de la reunión de Monterrey.



Otros elemento indicador de cómo va el mundo es la imagen de Yasser Arafat en su reciente encuentro con el mediador-negociador estadounidense. Se ve a un Presidente palestino no sentado, sino echado en un sillón, con la mirada perdida en el vacío, sin mirar a su interlocutor, con la mano izquierda apoyando el mentón y una expresión facial que parece decir «¿para qué seguimos con esta mentira?»



Desde esta Costa Rica que devalúa cada día su moneda en una unidad frente al dólar, y que sin embargo es bombardeada por la propaganda ideológica que dice que ahora estamos mejor que antes, las cosas de fuera parecen un horror inimaginable. Se trata de una similitud de ubicación con Chile que no parece casual, y que seguramente reside en una similar estructura social que aún en medio de la locura neoliberal resiste heroicamente a la idea de un planeta mitad libre y mitad esclavo.



* Ex embajador en Suiza.



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