Se aprecia que en general las personas encuestadas están de acuerdo en legislar frente a la temática del divorcio, siendo los segmentos más jóvenes quienes presentan mayores niveles de aprobación
La razón de la actividad legislativa es establecer reglas a situaciones que existen de hecho que al no estar reglamentadas, generalmente, las partes más débiles terminan dañadas y sufriendo situaciones injustas.
Las separaciones matrimoniales es una situación que se da de hecho en Chile y que afecta a un número considerable de personas, hombres, mujeres, ñiños y niñas.
Es por eso que la necesaria existencia de legislación sobre esta temática supera disputas valóricas y tiene mayor relación con temas de convivencia social, libertades personales, derechos violados, salud mental, entre otras.
En la última encuesta realizada por FLACSO-Chile en las temáticas abordadas por el área de género se observan significativos resultados en cuanto a la necesidad expresada por los ciudadanos/as de decidir con respecto a aspectos que atañen sus propias vidas.
De esta forma, temáticas tan rehuidas por algunos sectores políticos e ideológicos como el divorcio y el aborto encuentran niveles mayoritarios de aprobación ciudadana en cuanto a la necesidad de legislar sobre ellas, incluso en el segmento de personas pertenecientes a la religión católica.
Estos proyectos de ley que duermen en el Congreso y que han vivido múltiples mutaciones parecen ser tema de interés para la ciudadanía.
Frente a aprobar una ley de divorcio un mayoritario 80% esta a favor de legislar sobre el tema, siendo los más jóvenes (88%), de niveles socioeconómicos altos y medios (82%), de identificación ideológica de izquierda (87,6%) y sin religión (92,3%) los que presentan mayores niveles de aprobación. Sin embargo, es importante destacar que las personas que se identifican con la religión católica presentan un 80,3% de aprobación por sobre las personas que se identifican con otras religiones que presentan un 70,5% de aprobación.
Frente a esta pregunta no se observan diferencias de género significativas en las respuestas obtenidas, existiendo una diferencia más relevante en relación a los segmentos socioeconómicos (alto y medio – bajo) y en la identificación política, siendo los encuestados de derecha quienes presentan menores niveles de aprobación (72,2%) sobre el legislar sobre el divorcio en Chile. Aunque el sentido es igualmente a favor de aprobar una legislación.
En cuanto a cuáles serían las razones que debería considerar esta ley de divorcio, tema de debate legislativo actualmente, tres razones alcanzan importantes niveles de aprobación: «cuando ha habido hechos que imposibilitan la vida en común como por ejemplo: violencia, alcoholismo, entre otras» (87,1%), «cuando los dos integrantes de la pareja lo solicitan» (84,6%) y «cuando ha transcurrido más de un año de la separación de hecho» (67,6%). Se destaca el grado de aprobación de esta última razón que en el debate legislativo se ha extendido hasta dos años y que en la práctica llevaría a cuatro años de separación de hecho para lograr el divorcio vincular.
Una cuarta razón, que no es tan validada por los encuestados, tiene relación con: «cuando uno de los cónyuges lo solicita sin importar si el otro está de acuerdo» (40,2%). Esta razón alcanza 52,7% de las preferencias en el segmento de entrevistados sin religión. De esta forma se puede observar, que los ciudadanos desean soluciones consensuadas entre las partes frente al divorcio, por sobre decisiones unilaterales.
De lo anterior, se aprecia que en general las personas encuestadas están de acuerdo en legislar frente a la temática del divorcio, siendo los segmentos más jóvenes quienes presentan mayores niveles de aprobación.
Además, identifican distintas razones que debería contemplar esta legislación, exponiendo niveles de discernimiento y análisis frente a las alternativas planteadas, que no se condicen con el pensar que los ciudadanos no están en condiciones de tomar de decisiones sobre su vida cotidiana y los problemas que los afectan directamente, tal como parece observarse en algunos discursos de grupos que no están dispuestos a legislar y debatir sobre esta temática, o quienes pretenden establecer legislaciones con múltiples procesos de plazos y mediaciones, que sólo entorpecen el fin de situaciones de convivencia difíciles y que tienen consecuencias severas en las familias, que supuestamente se intentan defender.
Por otro lado, los resultados de la encuesta rompen los mitos levantados por sectores de la Iglesia Católica y de derecha, en relación a que estarían defendiendo los intereses de sectores que representan en el sentido que aún en los encuestados que se identifican con la religión católica y con una adscripción política de derecha, es mayoritario el interés de que exista legislación sobre esta temática.
Estos resultados son un llamado de atención a la clase política y a sectores ideológicos que en sus prácticas parecieran considerar que los ciudadanos son personas que no tienen capacidad para decidir sobre sus vidas, actuando en forma paternalista y autoritaria frente a la ciudadanía que dicen representar pero que conciben como menores de edad, intentando hacer generalizables sus intereses y valores al resto de la sociedad.
* FLACSO-Chile, Grupo Iniciativa Mujeres.
