Señor Director:
Empezando el 2011, me parece que se debería dejar de molestar a Ximena Ossandón. Se equivocó rotundamente. Sí, errores se cometen a diario y de la más diversa índole.
Eso no nos hace menos profesionales. La vida consiste en un aprendizaje a diario, a cada hora, a cada segundo. Con todo respeto, esa gente que la sigue criticando por Twitter y Facebook, parece que no tiene vida propia.
Además, la burla es vecina de la envidia, la descalificación y la arrogancia, todas «amigas» de la cizaña.
Nicolás Ward Edwards
Periodista