Publicidad

No a Alto Maipo: el partido institucional o la pichanga popular

Laura Duclos Besa
Por : Laura Duclos Besa Colectivo Maipo Organizado
Ver Más


La multitudinaria marcha del domingo 04 de agosto, dejó en evidencia un problema, aplazado por años debido a la lucha judicial, pero que ahora está más latente que nunca en el mundo social: el Proyecto Hidroeléctrico Alto Maipo (PHAM).

Claro, es que desde que el año 2007 comenzaron las gestiones del que sería un megaproyecto de la empresa norteamericana AES Gener, su construcción se ha visto retrasada por una serie de irregularidades en el proyecto que fueron evidenciadas por abogados y estudios de la Coordinadora Ciudadana de los Ríos del Maipo.

Si bien esta vía sirvió por un tiempo para frenar la nociva ambición empresarial del proyecto, sus próceres jamás pierden de local, en su propia cancha: la institucionalidad. Por una parte se debe a que todos los equipos partidistas (desde el Humanista hasta la UDI ) no cruzan la blanca raya de cal, y juegan dentro de los parámetros que los poderes empresariales marcan en esta cancha, donde el poder judicial viene a ser una suerte de arbitro reprochable.

[cita]¿Debemos seguir jugando en la institucionalidad? No, juguemos de locales, porque lo somos,  somos nosotros quienes vivimos en y del río, somos nosotros el 40% de la comuna que no tiene agua potable, y somos también los  santiaguinos que podemos perderla, somos los vecinos de maitenes a quienes les llega agua con pólvora por las excavaciones, somos los artesanos que viven del turismo que genera el río.[/cita]

Debido a la postergación del PHAM, este quedo sin financiamiento, lo que muchos vieron como un inminente fin definitivo del renombrado proyecto. Pero teniendo como antecedente que del total de la energía producida en el país el 35% va destinado exclusivamente a minería y que la gran parte del PIB chileno viene de este sector, AES Gener ganó un nuevo auspiciador, el destacado Grupo Lucksic, con el acuerdo de que la energía producida por el Alto Maipo fuera netamente para alimentar la necesidad de la minera “Pelambres” en la IV Región. Golazo.

Y ahora  nos preguntamos qué hacer ante esto,  ¿debemos seguir jugando en la institucionalidad? No, juguemos de locales, porque lo somos,  somos nosotros quienes vivimos en y del río, somos nosotros el 40% de la comuna que no tiene agua potable, y somos también los  santiaguinos que podemos perderla, somos los vecinos de maitenes a quienes les llega agua con pólvora por las excavaciones, somos los artesanos que viven del turismo que genera el río, somos el campesino que vive de la agricultura, somos el estudiante que podría tener educación gratuita y de excelencia si es que los recursos naturales fueran renacionalizados, somos los pobres que no podrán pagar las cuentas de agua, somos la soberanía  y la comunidad, los jugadores más importantes, que unidos seríamos el mejor equipo, y debemos jugar la pichanga donde siempre la hemos jugado en la cancha de cemento de la población creando conciencia y poder, debemos jugar en la calle sin permiso, mostrando la resistencia y la movilización, impidiendo que los jugadores de AES Gener lleguen al estadio y el Grupo Lucksic se lleve la copa de cobre.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
Publicidad

Tendencias