Señor Director:
En 1985 en la Provincia de Aconcagua se realizaron los primeros trabajos voluntarios de la FECh en dictadura, con la federación ya recuperada por los estudiantes. Los trabajos se organizaron en desacato a un estado de excepción decretado por Pinochet en 1984, ante lo cual el Ministro del Interior, Sergio Onofre Jarpa, dicta una orden de detención contra los cientos de estudiantes voluntarios.
Lo anterior pareciera un recuento más de la brutalidad por parte de una dictadura que asesinó, desapareció y torturó a miles de chilenas y chilenos. Sin embargo, hay dos hechos que ponen esos acontecimientos sobre la palestra hoy: la muerte de Patricio Manzano producto de maltratos y violencia durante la detención, y el que Alberto Cardemil, entonces subsecretario del Interior, llevara a cabo la orden de detención.
Patricio Manzano era estudiante de segundo año de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas (FCFM) de la Universidad de Chile cuando se encontraba en los trabajos voluntarios. Luego de recibir golpizas y estar bajo tensiones por horas, en la noche Patricio sufre un paro cardiorrespiratorio. Atendido por compañeros de medicina que exigen trasladarlo a un servicio asistencial, logran controlar el paro y que se llame a una ambulancia. El oficial a cargo no permite a los estudiantes acompañar a Patricio y continuar el masaje cardíaco, provocando su muerte.
Sorpresa e indignación generan el que hace unos días Cardemil haya sido nombrado Seremi de Hacienda en la Región del Maule por el gobierno de Piñera. Producto de la orden de arresto que él mismo aprobó, se produjo la golpiza de cientos de estudiantes y la muerte de uno de ellos. Es inaceptable que la impunidad siga siendo la norma ante casos de verdad y justicia por violaciones a los derechos humanos en dictadura. No sólo se mantiene impune, sino que se tiene el descaro de premiarlo con un cargo público.
Como estudiantes no descansaremos hasta que se conozca la verdad y exista justicia contra quienes han violado derechos humanos y siguen encubriendo su violación.
Gustavo Lagos
Vicepresidente Interno
Centro de Estudiantes de Ingeniería de la Universidad de Chile
