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RN y la candidatura de Longueira: «no está dicha la última palabra»

Algunos dirigentes de la UDI se apresuran a aclarar que Longueira nunca quiso decir que sus pretensiones fueran reemplazar al edil capitalino en las elecciones presidenciales del 2005, porque la lealtad del presidente de la colectividad hacia el líder de la derecha ha quedado ampliamente demostrada. Mientras que en RN recogieron el guante y reiteraron que sobre la candidatura de Lavín el 2005 aún no está todo dicho.


Diversas lecturas se le dio en la oposición a las declaraciones del presidente de la UDI, Pablo Longueira en las que no descarta una eventual candidatura presidencial. Aunque para algunos no existe claridad respecto a si el timonel gremialista se refería a ‘en vez de Lavín‘ o ‘después de Lavín‘, lo que sí esta claro en Renovación Nacional es que no existe disposición para aceptar la oferta de «lleve dos por el precio de uno; por el contrario, no temen enfrentar a sus socios en unas primarias.



En la tienda de Sebastián Piñera nunca han entendido que respaldar a Joaquín Lavín en esta pasada para llegar a La Moneda el 2006, signifique que deberán hacer lo mismo con quien elija el actual edil capitalino como su sucesor para un segundo período de la derecha a partir del 2010.



Todo esto en el entendido que para la oposición, pero en particular para el gremialismo, Lavín tiene asegurado su aterrizaje en La Moneda.



De allí que algunos dirigentes de la colectividad se apresuran a aclarar que Longueira nunca quiso decir que sus pretensiones fueran reemplazar al edil capitalino en las elecciones presidenciales del 2005, porque la lealtad del presidente de la UDI hacia el líder de la derecha ha quedado ampliamente demostrada.



Sin embargo, admiten que existen, en torno al presidente del partido, personas que lo consideran buen candidato presidencial, nunca antes o en vez de Lavín -insisten-, pero señalan que para pensar en candidaturas sucesoras del alcalde falta tanto que no vale la pena generar polémica en torno al tema.



Otros en la UDI han tomado con humor el exabrupto de Longueira, asegurando que nunca ha pensado en ser candidato presidencial y que sólo dejó abierta tal posibilidad porque la pregunta lo tomó por sorpresa. Este sector asegura que no vale la pena levantar una polémica artificial sobre algo que no tiene sustento real.



RN acusó el golpe



En la tienda de Piñera no dejó de sorprender la actitud de su aliado, menos aún cuando el lunes 12, senadores de ambas colectividades comieron con Joaquín Lavín para plantearle, entre otras cosas, la molestia de Renovación Nacional por la poca voluntad unitaria demostrada por el gremialismo.



Uno de los participantes en el encuentro explicó que el primer objetivo de la reunión ‘privada’ era analizar en conjunto con el jefe comunal las reformas constitucionales y plantearle la "necesidad de romper el empate que genera el sistema binominal", lo que no favorecería a un eventual gobierno de Lavín, al no contar con la mayoría en el Congreso.



Según uno de los participantes en la reunión el alcalde habría escuchado "con atención" el planteamiento y habría asegurado que la resolución de este impasse implica un "problema de oportunidad".



Bueno, desde esa reunión, en RN están convencidos que no sólo se cerraba la molesta polémica por la conversación telefónica entre el timonel de la DC y Piñera, sino que además se reiniciaba -como tantas otras veces- un nuevo camino de unidad.



Por esta razón, las declaraciones de Longueira, que implican truncar la aspiración de Renovación Nacional de suceder a Lavín en La Moneda, no cayeron nada bien en RN, menos aún cuando la tienda tiene dos figuras que nunca han ocultado sus aspiraciones presidenciales: el propio timonel de la colectividad, Sebastián Piñera, y el senador Alberto Espina.



Para Espina el máximo dirigente gremialista está en su derecho de aspirar a suceder a Lavín, y asegura que estaría "encantado" de enfrentar a sus socios en primarias. Pero además, en RN insisten en algo que se ha venido planteando desde hace mucho y que parece cobrar fuerza mientras más difícil se hace el camino aliancista, por un lado, y mientras más se desperfila Lavín, por el otro.



De allí que sea el propio Espina quien asegure que respecto de las elecciones presidenciales del 2005 «la última palabra aún no esta dicha».



Las declaraciones de Longueira reflotaron en Renovación Nacional la teoría de que el alcalde de Santiago "tiene un derecho preferente" para representar a la derecha como abanderado presidencial, pero que no se le ha entregado un cheque en blanco. Aprovecharon la oportunidad para recordar que administrar la Municipalidad de Las Condes no es lo mismo que la de Santiago, cosa que parece estar quedando cada día más clara para el propio Lavín.



Por otra parte, el secretario general de la colectividad, Renato Sepúlveda, señaló que en su partido, en el que reconoce aspiraciones presidenciales, nunca se ha analizado el tema presidencial, pero que en todo caso RN nunca ha pensado que vaya a ser fácil una eventual negociación sobre esta materia.



Por otra parte, el alcalde de Santiago parece observar con beneplácito una eventual candidatura de Longueira, tanto que en entrevista con un canal de televisión señaló que si el presidente gremialista estuviera mejor posicionado, él mismo votaría "feliz" por Longueira. Aunque se sabe que el timonel de la UDI nunca apuntó a ocupar el lugar del líder opositor el 2005, la reacción de Lavín abre la posibilidad de sellar desde ya el tema de la sucesión, pese a que de todos modos ese está actuando sobre un escenario ficticio.



En tanto, el presidente de Renovación Nacional no quiso referirse al tema y ante la pregunta de rigor en torno a si considera como una advertencia para RN las palabras del jefe de la UDI, se limitó a señalar ‘no comment’.



La avanzada de la DC



Mientras en la derecha ya se está pensando en la eventual sucesión de Lavín, la Democracia Cristiana renueva fuerzas para evitar perder el centro político frente a la UDI.



Aunque Adolfo Zaldívar admite que la tienda de Longueira consiguió avanzar hacia ese sector más por omisión de la DC que por méritos propios del gremialismo, aseguró que tras las recientes elecciones territoriales del partido, en que su sector se consolidó como la primera fuerza de la colectividad, se terminó la ventaja para la derecha.



Ante la polémica generada por las declaraciones del presidente gremialista, en que deja abierta la posibilidad a una candidatura presidencial, el senador colorín indicó que la UDI ha quedado al desnudo ante la ciudadanía que esta observando que la colectividad de Longueira "no tiene ideas, no tiene propuestas y lo comienzan a sentir y eso, por cierto, les debe traer las dudas de si acaso reemplazan o no reemplazan a Lavín".



No obstante, añade que el real problema que enfrenta actualmente el gremialismo es que "no tiene nada que ofrecer y mañana un hipotético gobierno de la derecha no tendría cómo gobernar a Chile".

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