El explosivo crecimiento de la UDI y su nueva actitud frente al Gobierno han traído consigo algunos beneficios paralelos impensados hace algunos meses. Algunos positivos, como el ascenso de Pablo Longueira al selecto grupo de los cinco políticos con más futuro, y otros no tanto, como los sucesivos conflictos con sus aliados de Renovación Nacional. Novoa abordó estos y otros temas.
– ¿Qué significa para la UDI el ingreso de Pablo Longueira a los Top Five de los políticos con más futuro?
– Para la UDI, obviamente, es un motivo de gran satisfacción el que nuestro presidente se proyecte en la forma como lo está haciendo. Eso habla del liderazgo de Pablo y habla bien de la UDI, que se ha transformando en el partido más grande de Chile. De alguna forma también resulta razonable que el presidente del partido más grande sea visualizado como uno de los políticos con mayor proyección.
– ¿Es conveniente esto para la UDI?, ya que en fondo se le visualiza como un presidenciable más, ¿Se le podría considerar cómo el reemplazo de Lavín o como la continuidad?
– Desde luego, es conveniente. Pero nosotros tenemos muy claro el candidato presidencial para el año 2005, que es Joaquín. Y en la medida que se perfilan otras personas de la UDI es muy bueno para el partido a todo evento. En otros partidos donde hay pugnas internas y problemas, a veces, es un problema, pero para nosotros no. Nosotros tenemos muy claramente despejado el tema: Joaquín Lavín es el candidato de la UDI y de la Alianza. Es la persona que está en la mejor posición para alcanzar la Presidencia.
– A propósito de la candidatura de Lavín…¿Con quién le sería más fácil competir: con Eduardo Frei o con una mujer? Hay quienes estiman que una mujer sería el verdadero cambio…
– Esa es una visión muy sesgada de la política. Cómo se va a hablar de cambio si la candidata es representante de la Concertación, ministra de la Concertación -cualquiera de las dos que sea-, eso no es cambio.
– ¿Con quién le costaría menos una competencia a Lavín?
– No me gusta hacer política de ficción. Ni siquiera me gusta demasiado hacer análisis político. Soy muy realista ¡con el que ponga la Concertación, pues, yo no voy a poder influir en eso! A mí no me gustaría que la Concertación empiece a pautearnos sobre quién debiera ser nuestro candidato y no creo que a la Concertación le guste. Tenemos que estar preparados para cualquier candidato, eso es lo más importante.
– ¿Cómo ve el tema municipal-parlamentario, considerando la situación que atraviesa la Alianza por Chile?
– Lo veo igual que siempre. Con Renovación Nacional hemos ido juntos en cuatro elecciones parlamentarias, tres municipales y tres presidenciales. Hemos tenido los problemas que tiene toda alianza para armar las listas, pero siempre los hemos podido superar. Y hemos tenido, como alianza, una trayectoria política en ascenso.
«Tenemos por delante los mismos desafíos de siempre: armonizar una lista que normalmente, en el 90 por ciento de los cupos y candidaturas no presenta problemas, siempre quedan algunos distritos de diputados o algunas senaturías o algunas alcaldías que generan algún tipo de ruido y que normalmente se resuelven casi encima de las inscripciones electorales», explica.
«Como ahora estamos con un desafío muy grande por delante, no sólo armar las listas parlamentarias, sino ganar la presidencial con una opción muy probable, nos hemos puesto más exigentes y queremos despejar todos nuestros problemas electorales con bastante tiempo. Y yo entiendo que las comisiones electorales de los partidos se van a juntar probablemente después del 18 (de septiembre) para comenzar a trabajar en esa línea».
– Da la sensación que la reunión Piñera-Lavín no generó los resultados esperados y no se habría solucionado el aparente stand by en que está el tema electoral en la alianza…
– No me parece que sea así. Lo que nosotros hemos planteado, y coincidimos con Renovación Nacional, es que es bueno despejar ese tema con prioridad a otro tipo de cosas, como es la funcionalidad de la alianza. Y entiendo que ellos están de acuerdo en que despejemos primero el tema electoral.
– En este contexto ¿Qué le parecen las declaraciones del ex presidente de RN Andrés Allamand que ha dicho que la Alianza por Chile es un desastre?
– Andrés Allamand se equivoca mucho en sus declaraciones. Las encuentro pésimas, no estoy de acuerdo con él para nada. Me da la impresión que Allamand, que tiene muchos méritos, pero también ha tenido bastantes fracasos en su carrera política, debiera cuidarse mucho de dar opiniones de ese tipo. Porque lógicamente que perjudica a la Alianza que alguien que fue presidente de Renovación Nacional tenga una opinión de ese tipo.
«La realidad es que nosotros, primero, nos sentimos muy orgullosos del éxito de la UDI y, segundo, creemos que la Alianza gracias al esfuerzo de ambos partidos ha logrado algo que en Chile hace 50 u 80 años no se conocía: que la derecha o la centro derecha prácticamente fuera igual al resto de las fuerzas políticas. El tener un 44 por ciento de la votación, en la última elección parlamentaria, es un éxito sin precedentes en los últimos 50 o 60 años de historia política en Chile. No me estoy refiriendo a la elección de Joaquín Lavín, que le empató a quien representaba a la izquierda, a la Democracia Cristiana y al Partido Radical juntos. No veo de dónde alguien que entienda algo de política pueda decir que la alianza es un desastre«.
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