Fuentes militares sostienen que existieron gestiones ‘de alto nivel’ para que la justicia castrense fuera la que llevara a cabo la investigación. Esto se relaciona con la vigencia de la Reforma Procesal Penal en la XII Región, sistema en el que las audiencias son públicas. Con este traspaso se evitarán eventuales filtraciones de »secretos de Estado».
El Ministerio Público de Punta Arenas se declaró incompetente para investigar el robo-espionaje ocurrido en el consulado de Argentina de dicha ciudad, acción que fue perpetrada por agentes de contrainteligencia militar.
La decisión de enviar los antecedentes a un fiscal castrense guarda relación con la eventualidad de que se ventilen »secretos de Estado», ya que el nuevo procedimiento criminal que rige en la XII Región es de carácter público y oral.
Analistas militares ya habían previsto que una situación así se produciría. Se estima que el traspaso evitará mayores bochornos públicos a la inteligencia militar chilena.
Fuentes militares consultadas por este diario manifestaron que se hicieron gestiones de »alto nivel» para evitar que la investigación quedara en manos de la justicia civil y fuera traspasada a la castrense, cuyo instructor puede decretar el secreto a la investigación y evitar que se filtren datos importantes.
En el caso hay cuatro personas detenidas, según informó hoy la ministra de Defensa, Michelle Bachelet, quien, sin embargo, declinó entregar los nombres de los detenidos para no entorpecer la investigación en curso. Bachelet dijo que no se revelarán las identidades hasta que se determine si se les da o no de baja.
Añadió que los aprehendidos se encuentran en una unidad militar en la XII Región y que la fiscalía de la zona determinará el lugar definitivo de detención.
Entre los detenidos se encontrarían Luis Alberto Robles Ricus, agente de contrainteligencia que dejó su carné en la sede diplomática; y el mayor Rodrigo Acuña Délano, jefe operativo del Departamento de Inteligencia Conjunta, quien sería la otra persona que ingresó al lugar.
Respecto de la eventual participación de oficiales en el caso, explicó que «se aceptó la renuncia del general (Waldo) Zauritz, por lo que se llama la responsabilidad final del mando», pero que no debe especularse acerca de responsabilidades de otra índole de mandos superiores del Ejército y menos de intereses políticos para perjudicar a Argentina.
En este mismo sentido, el embajador de Argentina en Chile, Carlos Enrique Abihaggle dijo que ésta «ha sido una acción burda, yo creo que de alguien que seguramente responde a ciertos intereses particulares, o de grupos, pero no políticos».
Zauritz será reemplazado esta tarde por Luis Eduardo Calvel en la comandancia en jefe de la Región Militar Austral.
El origen
El sábado, el cónsul adjunto en Punta Arenas, José Andrés Basbus, sorprendió a dos personas que habrían revisado e intentado robar documentación confidencial de la legación.
En el incidente, que sólo fue revelado la noche del domingo, se encontraría involucrado Robles Ricus, identificado por un carné encontrado en el lugar.
Además, la cartera cursó la baja del comandante en jefe de la Región Militar Austral, general Waldo Zauritz Sepúlveda, y del jefe de la Unidad de Inteligencia de la zona, teniente coronel Víctor Hugo Poza Reyes, por su responsabilidad en el incidente.
En todo caso, la operación tenía ‘ingredientes’ concretos. La inteligencia chilena investigaba a espías argentinos que compraban información. De allí que se mantuviera bajo vigilancia al vicecónsul de la sede diplomática.
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