La comisión política de RN llamó nuevamente la atención a la diputada y la conminó otra vez a guardar silencio. A la UDI tampoco le agradó que su timonel contribuyera a reponer el caso en el ámbito político. Los esfuerzos de ambos partidos por judicializar definitivamente el tema fueron sobrepasados.
Con el riguroso silencio impuesto a la diputada Pía Guzmán, tanto por Renovación Nacional como por su propio abogado, se había logrado bajar la intensidad al conflicto de la alianza por Chile, aunque sólo fuera en el ámbito público, lo que ya era bastante para algunos dirigentes de ambas colectividades.
Sin embargo, el panorama cambió abruptamente la semana pasada, cuando la legisladora cuestionada por la UDI decidió romper su silencio dando sendas entrevistas a un medio institucional -revista Fibra– y a la revista Caras.
Lejos de lo que hubiera esperado la UDI y un sector de su propio partido, Pía Guzmán no se retractó de sus denuncias, sino que se limitó a reiterar lo dicho semanas antes en su declaración pública, en orden a que lamentaba el daño causado a los parlamentarios que se les ha relacionado con el caso Spiniak y a sus familias.
En este contexto, la diputada volvió a alterar el naipe en las altas esferas de RN, que veían con agrado que tras el esfuerzo realizado por la directiva se había logrado que el tema que relaciona a parlamentarios con las fiestas del empresario pederasta estaba quedando, de a poco, concentrado en los tribunales de Justicia.
Por esta razón, la comisión política de anoche dedicó gran parte de su tiempo a darle un ‘tirón de orejas’ a la diputada Guzmán y, una vez más, se le conminó a guardar silencio para evitar que el polémico caso vuelva a ocupar las portadas como un tema político.
Este problema no sólo lo tiene RN. En la UDI su titular también rompió el silencio. Pablo Longueira decidió salir de su autoimpuesto silencio a través del vespertino La Segunda, donde aseveró que su partido tiene reveladores testimonios de personas que pueden desvirtuar las declaraciones de Gemma Bueno.
Esto también causó molestia en algunos sectores de la UDI, que hubieran preferido que el timonel que la colectividad contribuyera a tranquilizar los ánimos no haciendo declaraciones. De hecho, al menos dos parlamentarios señalaron que el caso Spiniak debe ser remitido a los tribunales de justicia de una vez por todas, y admitieron que las entrevistas tanto de Longueira como de Guzmán no han contribuido a ello.
Mientras tanto, en abierta discordancia con la actitud del presidente de la UDI, el resto de los dirigentes se mantuvo ayer en un estricto hermetismo a fin de bajar el tono al caso Spiniak en el ámbito político, pues entre los gremialistas existe el convencimiento de que el silencio será la única fórmula que permita que sean los tribunales los que lleguen al fondo de la verdad en relación con las denuncias entrecruzadas que existen.
Por otra parte, tras la comisión política ordinaria de RN, se podía visualizar la molestia en los rostros de quienes abandonaban la sede al término de la reunión. Una vez mas, la instancia llegó a acuerdo de mantener en reserva los temas abordados. La diputada Guzmán tampoco quiso hablar con la prensa y al ser consultada respecto al anuncio de que la UDI ampliaría la querella en su contra, la legisladora se limitó a decir que no se referiría al tema.
Este es uno de los aspectos que habría causado molestia en la comisión política y en los abogados que la conforman, ya que algunos estimarían que las entrevistas otorgadas por la diputada habrían nuevamente detonado la furia de sus ‘socios’, que evalúan ahora la ampliación de la querella. Esto, aun cuando en RN siempre tuvieron certeza de que la acción legal por injurias y calumnias no tendría destino pues la legisladora nunca dio nombres.
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