Embajador chileno ante la ONU dice que ahora el grupo de Osama Bin Laden no actúa en forma jerárquica sino que es una red descentralizada, lo que »es un fenómeno más difícil de combatir». Cree que este tipo de ataques continuarán »mientras no mejoremos la inteligencia, la cooperación diplomática y reforcemos la ayuda a los estados débiles».
El embajador de Chile ante Naciones Unidas, Heraldo Muñoz, estaba choqueado, al igual que todo el mundo, por los atentados producidos en Londres por la red de Al Qaeda y que dejaron, en principio, cerca de 50 muertos y más de 700 heridos.
En Nueva York se reunieron ayer los embajadores que se encuentran en la ONU para analizar la situación y dar el pésame al representante diplomático de Gran Bretaña ante el organismo internacional Emyr Jones Parry. "Si el miércoles los londinenses estaban celebrando la sede de las Olímpiadas, al día siguiente estaban llorando las víctimas del atentado terrorista", comenta Heraldo Muñoz.
Agrega que todos los representantes antes la ONU, como era obvio, evaluaron el atentado en la capital británico y tras ello hubo una condena muy firme y unánime a la actuación de Al Qaeda. "Se reafirmó fuertemente la voluntad de que se actúe conjuntamente para luchar contra este flagelo que es el terrorismo".
«Proceso de largo aliento»
-Por más que se ha dicho que Al Qaeda está vigilado, lo cierto es que sigue adelante con sus acciones.
-No hay soluciones mágicas para combatir o eliminar el terrorismo de Al Qaeda, es un proceso de largo aliento. El grupo terrorista ha cambiado muy drásticamente desde el 11 de septiembre del 2001 cuando se produjo el atentado a las Torres Gemelas y al Pentágono.
-¿Cómo ha cambiado?
-Ya no es una organización vertical, ni jerárquica, donde Osama Bin Laden emite instrucciones como sucedió el 11 de septiembre del 2001, sino que es más bien una ideología, una red descentralizada de múltiples organizaciones, unas 40 a través del mundo. Van del sudeste asiático hasta Europa pasando por el norte de África y el Medio Oriente, por lo que es un fenómeno más difícil de combatir. Si bien es cierto que se han logrado avances y han sufrido golpes, porque se ha capturado a varios de los lugartenientes de Osama Bin Laden y hemos logrado congelar más de 135 millones de dólares de organizaciones e individuos vinculados a la red.
-Es más complicado, entonces, cuando los terroristas actúan en forma separada.
-Lo cierto es que cuando estas células tienen independencia operativa, la detección y la prevención se hace más difícil. Me temo que existirán atentados de esta naturaleza mientras no mejoremos la inteligencia, la cooperación diplomática, y reforcemos la ayuda con los estados débiles ya que muchos países tienen conciencia de que hay un problema de terrorismo en su frontera, pero no tienen los medios para enfrentar esta situación. Y, en último lugar, que en tanto no cumplamos las obligaciones que emanan del Consejo de Seguridad de la ONU, pues si bien hemos avanzado en este ámbito, nos queda camino por recorrer.
"La solución no es meramente militar"
¿Por qué la inteligencia en el mundo, en estos casos, no actúa en forma globalizada
-No es mi área, pero ciertamente después de estar dos años al frente del Comité de Sanciones contra Al Qaeda y los Talibanes sé que la solución no es meramente militar. Buena parte de las soluciones es el intercambio de informaciones en inteligencia y de una manera coordinada. Hasta que tomamos la iniciativa el comité que presidí no tenía un contacto directo con Interpol. Eso ha mejorado mucho la información en la frontera, que son los puntos de entrada de los países, pero aún falta mejorar otras áreas.
-¿Cómo cuáles?
-Un diálogo entre civilizaciones, porque no se puede confundir el combate al terrorismo con la identificación de una determinada religión o etnia. Tiene que haber un apoyo a los países y movimientos islámicos moderados. Presidentes y cancilleres me decían que debíamos estimular a los países, que tienen autoridad religiosa importante, a emitir pronunciamiento condenatorios de estos atentados de Al Qaeda. Hay que hacer un trabajo en el ámbito ideológico y político, como también eliminar las excusas que usan los terroristas para reclutar jóvenes frustrados que buscan dignidad o que no tienen futuro. Me refiero a situaciones políticas excluyentes como las del Medio Oriente e Irak.
-Pero se supone que las policías deberían haber actuado en conjunto con los gobiernos o con el comité antitalibán de Naciones Unidas.
-Se supone, pero no se había hecho. Hay que hablar más y Naciones Unidas es fundamental.
-Ahora Italia puede estar en la mira….
-Todos los países europeos están tomando medidas adicionales y aquí en Estados Unidos se han incrementado las medidas de vigilancia en las grandes ciudades y en las salidas del metro de Nueva York hay más policías.
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