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Ex colaboradores de Alvear cuestionan polémica entre colorines y disidentes

Mariana Aylwin y Juan José Santa Cruz aseguran que la Democracia Cristiana está »deteriorada» por las disputas entre ambos sectores. Además, señalan que existe la percepción en la ciudadanía que dichas tendencias sólo quieren repartirse los cupos de un eventual cuarto gobierno oficialista, encabezado por Michelle Bachelet.


La integración de nueve militantes de la DC al comando de la candidata presidencial de la Concertación, Michelle Bachelet, reavivó la pugna entre las principales tendencias de la colectividad: el grupo liderado por Adolfo Zaldívar, los colorines, y el encabezado por Jorge Pizarro, los disidentes.



A tal punto llegó la disputa en los últimos días que al interior del partido se señala que en marzo, cuando se realicen las elecciones internas de la falange, habrá una verdadera lucha entre titanes, que recrudecerá las tensiones generadas en la tienda de la flecha roja.



Los que han cuestionado duramente el ingreso de la DC al comando son los disidentes, que aseguran que no hubo equilibrio y que Zaldívar sólo instaló a gente de su confianza. Mientras, los colorines guardan silencio y no quieren -según dijeron- contribuir a una polémica que solo fue creada por Pizarro y compañía.



El silencio incluso llegó a los propios decé del comando presidencial. El Mostrador.cl consultó a Patricio Santamaría, Enzo Pistacchio, Carolina Leytao y Alejandro Foxley sobre el tema, pero declinaron hacer comentarios, indicando que el único encargado de pronunciarse era el secretario general de la DC y director ejecutivo de la campaña bacheletista, Jaime Mulet.



Al ser interrogado sobre la materia en cuestión, el diputado sólo dijo: "No me voy a referir a eso». Según fuentes del comando, Mulet pidió el martes recién pasado a cada uno de los demócrata cristianos que están en ese grupo no hacer ningún tipo de comentario a los medios de comunicación para "no entrar en conflictos artificiales".



Sin embargo, hay otros dirigentes de la DC que circunstancialmente estuvieron en la disidencia, pero que hoy condenan la disputa entre estos últimos y los colorines, expresando que la polémica daña más a una falange que se encuentra «deteriorada» y que la gente está cansada de este estilo de hacer política.



Mariana Aylwin: "Parece un partido desesperado por repartirse el botín"



Plenamente molesta se encuentra la ex ministra de Educación y ex encargada del área programática del comando de Soledad Alvear, Mariana Aylwin, sobre la polémica que se ha generado a raíz del ingreso de la DC al comando de Bachelet.



-¿Fue un error de la mesa directiva de la DC no integrar a la disidencia al comando, como ellos lo señalan?
-Ella (Bachelet) definió los nombres y armó su equipo, entonces creo que pasarle la cuenta a Zaldívar no corresponde. Esto simplemente da la imagen de un partido desesperado por repartirse el botín entre dos grupos de poder interno.



-Al interior de la colectividad dicen que los cuestionamientos de los disidentes es un disfraz sobre el tema de fondo, que es conseguir la presidencia en enero o marzo del próximo año. ¿Cuál es su opinión?
-A mí me parece que la forma de actuar de la mesa directiva como de la disidencia está movida por la intención de quién se queda con el partido en las próximas elecciones, y esto hace que muchos dirigentes y militantes de la DC no se sienten identificados ni con Pizarro ni con Zaldívar, y en definitiva se alejan de un estilo manejado por personas que siempre aparecen, públicamente, enojados, criticando a todo el mundo y hablándole a un grupo interno del partido o de la Concertación.



En cambio, hay nuevos liderazgos que tienen más sintonía con el mundo actual y que aparecen en una actitud más optimista. Me refiero a gente como Alberto Undurraga, Jorge Burgos, Ignacio Walker, Sergio Micco, Clemente Pérez, Sergio Espejo y Claudio Orrego, por ejemplo. Ellos y otros no están disponibles para una operación política que está destinada a sustituir a un grupo por otro y que al final son de similares características.



-¿Esto está dañando la imagen de la DC?
-Yo creo que aunque la tienda suba dos o tres puntos en la próxima elección parlamentaria se va a percibir una sensación interna y también de la ciudadanía, en orden a que la DC está deteriorada. A mi juicio, esto sólo se puede cambiar con una renovación de la DC, encabezada por nuevos liderazgos e ideas.



Quizás esto sea un trabajo de largo plazo, pero también pasa por construir una nueva mayoría en la DC, que sea más transversal, que potencie liderazgos distintos y que tenga una mayor sintonía con la ciudadanía.



-¿En las próximas elecciones de la DC ello se manifestará?
– Yo creo que sí. Cuando uno conversa con los militantes y dirigentes denota que están cansados con un estilo de hacer política por parte de la DC, el que nos está llevando al desastre, y desde hace mucho tiempo.



-¿Qué llamado le haría a estos dos grupos?
-Yo le haría un llamado a ponerse a trabajar por Bachelet y a discutir estos temas cuando sea el momento adecuado y no ahora. Y así como nos farreamos la oportunidad de tener una candidata presidencial DC por peleas internas, capaz que terminemos deteriorando las posibilidades de Bachelet por lo mismo.



Juan José Santa Cruz: "Sería patético pelear por cargos»



El ex gerente del comando presidencial de Alvear también se sumó a las críticas contra estos dos sectores de la DC. A su parecer existe una percepción en la ciudadanía que dirigentes de la colectividad se están peleando por los cargos de los ministerios y servicios públicos de un eventual cuarto gobierno de la Concertación.



-¿Cuál es su impresión sobre la polémica que se ha generado al interior de la DC por el ingreso militantes de esa colectividad al comando presidencial?
– La integración de la DC al comando es lo que propuso la mesa del partido, y está en todo su derecho de poner la gente que ella estime, y mal que mal es lo que históricamente se ha hecho. Ahora, si están representadas las distintas sensibilidades yo creo que no, pero no veo la sorpresa. La candidata es la que resuelve a quién nombra y está en todo su derecho.



-¿Esto es poco plural y se atenta contra la unidad del partido, tal como lo dijo el ex diputado Gutenberg Martínez?
-Yo creo que la opinión de Martínez es muy respetable porque personalmente puedo sentir que no están representadas todas las sensibilidades, pero la opción es legítima. Lo que yo entiendo es que se presentó una lista de personas, evidentemente que la mesa presentó a la gente más afín a ella, y la candidata optó por eso y si alguien esperaba otra cosa lo encuentro insólito, no sé cuál es la polémica ni menos entiendo las criticas del senador Jorge Pizarro, quien en menos de 24 años se hizo cargo del comando de Bachelet en la Cuarta Región. ¿Cuál es el sentido?.



-¿Algunos señalan al interior del partido que ello es para sacar dividendos políticos?
-Puede que sí, pero no quiero hacer esa interpretación, ya que prefiero quedarme con los hechos objetivos. Ese es el comando que hay y punto, y si después se forma una comisión política, donde haya personeros de alto nivel, puede ser bueno, aunque personalmente creo que esas cosas en general son poco prácticas.



El tema operativo de campaña ya está estructurado y si hay una dirección política sería bueno, pero lo malo es llevar a la prensa un problema interno de la DC, el cual debe arreglarse adentro. El partido sólo debe preocuparse de trabajar por sus candidatos al Parlamento y no mostrar públicamente un problema sobre cuotas de poder. Eso lo encuentro muy negativo y daña mucho a la DC.



Yo creo que la ciudadanía percibe que hay una preocupación de quién en definitiva va a tener poder para negociar los cargos en el próximo gobierno de la Concertación. Eso lo encuentro patético.



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Contacto:



sjaramillo@elmostrador.cl



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