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Un foro de inusuales coincidencias en que todos apuntaron contra desigualdad

Con estricto cumplimiento de los plazos para responder por parte de los cuatro contendores en disputa, el »cara a cara» televisivo cumplió con los objetivos que se puso cada uno de ellos. Bachelet fue la más reflexiva y tranquila, Lavín el más agresivo y sorprendente, mientras Piñera trataba de generar empatía y Hirsch aprovechaba la inusual exposición.


Un agitado y vivo debate sin mayores sorpresas ni efectos dramáticos (salvo tal vez la encendida postura de Lavín de proclamarse el abanderado de los pobres) que pudieran alterar de manera trascendental lo que ha sido hasta ahora el tono de la campaña presidencial en marcha sostuvieron este miércoles por la noche los cuatro abanderados en pugna: Michelle Bachelet, Sebastián Piñera, Tomás Hirsch y Joaquín Lavín.



Cada uno apuntó a reforzar sus potencialidades y aminorar sus debilidades de la forma que mejor pudieron hacerlo. De este modo, Bachelet optó por la prudencia y por no salirse del esquema de una mujer tranquila y confiable, que se identificó con la obra de la Concertación pero al mismo tiempo marcó distancia con el gobierno de Lagos al no defenderlo con entusiasmo cuando éste recibió ataques.



Lavín, en tanto, adoptó un tono belicoso y agresivo, y prefirió tratar de anclar los temas básicos de su campaña -como delincuencia- con ejemplos concretos, como el de un comerciante asaltado en San Ramón. Al final, a su vez, reveló su juego al pedir una oportunidad para llegar a una segunda vuelta, donde él quiere medirse con Bachelet.



Piñera, a su turno, pretendió mostrarse cálido y alejado de la imagen de empresario exitoso, que tiene poca empatía con el electorado. De allí las referencias a su familia, a su mujer, Cecilia, y a sus padres, "un empleado fiscal y un ama de casa".



Por último, Hirsch fue la gran revelación de la noche, quizás por haber sido el candidato que hasta ahora menos oportunidad tuvo de estar bajo los focos. Las encuestas post debate revelan que su performance fue bien evaluada por la gente, lo que no implica necesariamente que esos puntos de adhesión a su imagen mediática se transformen en votos a su favor en diciembre.



Abrió los fuegos del encuentro organizado por UCTV y CNN, denominado "Chile 2005: Foro Presidencial" y llevado a cabo en el Espacio Riesco, la periodista Constanza Santa María, quien dio la bienvenida a los candidatos y explicó la modalidad del encuentro, antes de pasar a una pausa comercial que antecedió la emisión de una hora de duración, a partir de las 22 horas, con un ritmo vertiginoso.



Tema uno: delincuencia



La primera pregunta estuvo relacionada con la sensación de inseguridad ciudadana que de algún modo acompaña, en forma inseparable, a la relativa prosperidad económica que vive Chile en el marco de América Latina. ¿Cuáles son las causas y cómo piensa enfrentarlo?, fue el interrogante concreto de Glenda Umaña, la conductora de CNN que hizo dupla con Santa María.



Tomás Hirsch, el candidato del Juntos Podemos Más, consideró acertado preguntarse por las causas, pues "he escuchado a todos los demás candidatos proponer medidas represivas de todo tipo". A su juicio, el tema de fondo es "un modelo económico hecho para el 5% de la población, que por supuesto genera violencia". Violencia que, recordó, se validó durante la dictadura. Ante una repregunta, dijo que a corto plazo es necesario un "plan de emergencia de equidad, darle espacio a los jóvenes y reforzar, por cierto, el sistema judicial", pero con más énfasis en las causas de la delincuencia que en sus síntomas.



A su turno, Michelle Bachelet coincidió en señalar que este fenómeno tiene que ver con problemas de falta de oportunidades, desempleo, abandono, etc. Y sostuvo que, por un lado, es necesaria la mano firme, a través de "la primera es la vencida" y aumentar la dotación policial en 500 plazas por año. Pero también es necesario, dijo, proveer más recursos que impidan que los jóvenes deserten de los colegios y nuevas oportunidades de empleos, junto con una mayor coordinación de las policías y la creación de una unidad de apoyo a las víctimas.



Sebastián Piñera apuntó, a su vez, que se está frente a un problema real, "porque esta batalla la estamos perdiendo por paliza". Recordó que hoy se cometen "el doble de delitos que cuando este gobierno asumió". Y planteó la necesidad de una "mano firme" y una "mano acogedora" ante el delito. Habló también de las cárceles sobrepobladas, con capacidad para 23.000 reclusos, "donde hoy tenemos 40.000". Y exigió contar con 12.000 policías más.



A renglón seguido, Lavín, con un tono más duro que el que habitualmente se asocia a su imagen, dio el primer golpe teatral al decir: "Yo tengo acá el carnet de Roberto Araneda (mostrando una cédula de identidad agujereada), que fue víctima de un asalto a su negocio en San Ramón" y salvó con vida de milagro. "Yo pregunto: ¿Hasta cuándo?". "Si Ricardo Lagos no fue capaz de derrotar a la delincuencia, no creo que vaya a ser capaz Michelle Bachelet", dijo, actuando como el agresivo "challenger" que debe desafiar cara a cara y con fuerza al candidato que aparece como favorito en los papeles.



"Yo pregunto a las mujeres de Chile, porque siempre tratan de ridiculizar mis ideas, dónde prefieren que esté preso el violador de Reñaca, si en una isla en el sur o en un lugar del que pudo escaparse", añadió Lavín, quien remató prometiendo que nunca daría un indulto a un narcotraficante.



Tema dos: desigualdad



La distribución del ingreso en Chile está entre las diez peores del mundo, en el nivel de países africanos como Nigeria y Zimbabwe. ¿Qué medida concreta proponen Uds. para revertirlas?, preguntaron las moderadoras.



Partió Bachelet, advirtiendo que "no hay una sola medida para resolverlo, porque no hay una sola desigualdad", recordando a las mujeres, los jóvenes, las regiones frente a Santiago y a los pueblos originarios. A su juicio, "un plan de igualdad de oportunidades implica también apoyo a las Pymes y elevar las pensiones", entre otras cosas. Se comprometió además en ese plano a una reforma previsional que eleve las pensiones mínimas y asegure una pensión asistencial como derecho universal. Un plan que cuesta, dijo, "180 millones de dólares".



Lavín, en tono irónico, recordó que a Lagos "Lo felicitan los reyes, las reinas y los empresarios. Pero si yo hubiera sido elegido Presidente, me habrían preguntado: ‘Joaquín, ¿qué pasó con la delincuencia, qué pasó con el lema de crecer con equidad? Me daría vergüenza", insistió, tratando de identificar a Lagos con Bachelet como un blanco único. "Trabajo y educación de calidad son las claves para reducir desigualdad", concluyó, prometiendo darle trabajo, de ser electo, en marzo de 2006 a los 500 mil cesantes.



Piñera, en tanto, sostuvo que 3 millones de chilenos bajo la línea de la dignidad "es indigno de un país como Chile", y dobló la apuesta de Lavín al prometer un millón de empleos. Tampoco se quedó corto cuando propuso terminar con la pobreza en cuatro años, lo que cuesta, dijo, mil millones de dólares. Y se plegó asimismo a la propuesta de Bachelet de mejorar las pensiones. Señalando luego que se debería aumentar la tasa de inversión de un 22 a un 28%.



Cerró la ronda de intervenciones Hirsch, quien dijo "me parece insólito que la derecha esté proponiendo equidad, cuando la desigualdad es producto del modelo que ellos mismos crearon". Insistió en reivindicar el derecho de los chilenos a salud, educación y vivienda dignas, indicando que "me parte el alma ver las desigualdades cuando recorro Chile". Y sobre la inversión extranjera, dijo "que vengan, pero que paguen impuestos tal como pagan todos los chilenos".



Tema tres: relación con Estados Unidos



Antes de contestar la pregunta directa sobre cuál debería ser, a juicio de los contendores, la vinculación futura de Chile con EEUU, Piñera se tomó unos segundos para retrucar a Hirsch. "He dedicado mi vida a crear empleo. Una cosa es decirlo -apuntó- y otra hacerlo…" En relación al tema específico dijo que había que apurar el área de libre comercio prometida por Bush padre desde Alaska hasta Tierra del Fuego. "Chile hizo bien al no ir a la guerra de Irak, porque no se habían agotado todas las instancias". Pero Mercosur, acotó, fue un "mal tratado para Chile", aunque el TLC con Europa lo compensa al aportarle al país la posibilidad de darle valor agregado a sus exportaciones.



Hirsch planteó, en cambio, la necesidad de fortalecer la unidad de América Latina, para ver "cómo nos defendemos de EEUU». También postuló la urgencia de "una integración que permita el libre tránsito de las personas, pues ahora sólo circulan libremente los capitales". Y finalmente de reducir los presupuestos bélicos y favorecer el acercamiento de los pueblos de Chile y EEUU, que tienen vínculos muy cercanos, "pero francamente hoy están en manos de un hombre muy peligroso para la humanidad", en alusión a George Bush.



Lavín, a su turno, planteó "pagar las deudas sociales con los ingresos del cobre, bajar impuestos a la bencina para favorecer a la clase media. Argentina no nos cumplió con el gas y viola nuestras bandas de precios", denunció, acusador, para luego reafirmar la importancia de la integración con Perú y Bolivia. "Eso sí, con Bolivia nunca ceder ni un milímetro de nuestra soberanía", advirtió.



Bachelet señaló, a su vez, que con EEUU las relaciones "son buenas y en esa línea vamos a continuar" "Hay convergencia en la misma línea de defensa de la democracia, y en la medida que cada país mantenga su autonomía…" Recordó que Chile mantuvo su posición discrepante frente al tema Irak, aunque estaba en marcha la negociación de un TLC. Otra prioridad, por cierto, indicó, es América Latina. Sobre el mandatario venezolano Hugo Chávez, recalcó que es un Presidente democráticamente elegido y reconfirmado en su cargo. "Creo que es un error considerar que sea un peligro para América latina. Los peligros -subrayó- son otros".



Tema cuatro: la concentración de la riqueza



-En los últimos años la propiedad de muchas empresas en Chile se han concentrado en pocas manos. ¿Qué hacer frente a esto?, preguntó Santa María.



"Este tema me preocupa mucho -señaló Lavín-. Cuando hay concentración, los precios son más altos. La Concertación se olvidó de los pequeños empresarios". El abanderado de la UDI citó a Hernán Somerville, quien dijo que los empresarios amaban a Lagos. Por qué no hacer, añadió, que el Banco Estado abra líneas de créditos para las Pymes, que dan ocho de cada diez empleos en Chile. El problema, dijo es que aquí "le ha ido bien a los grandes y mal a los chicos". Ante lo cual, la periodista dijo que le llamaba la atención que el sector que Lavín representaba no hubiera hecho nada para evitar esa concentración.



Bachelet dijo, a continuación, que "hace pocas semanas el Fiscal Económico denunció la colusión de isapres para bajar los beneficios y subir los precios de sus programas". "Me alegra oírlo decir (a Lavín) que podamos fiscalizar más". Y planteó la posibilidad de instaurar la figura de un "zar de la libre competencia", "una instancia que pueda garantizar que funcione una Fiscalía Nacional Económica autónoma en defensa de los ciudadanos".
Hirsch señaló, a su vez, que "la concentración que hay en Chile es un escándalo". Y le pareció llamativa que contrincantes como Lavín "rasgaran vestiduras" con el tema, "cuando ellos crearon el modelo durante la dictadura de la que formaron parte". Al preguntarle la periodista en qué país han resultado sus ideas, Hirsch arguyó que es cuestión de "mirar el programa degobierno que he presentado al país. No tenemos que andar mirando para otro lado".



Piñera habló, en tanto, de los dos talones de Aquiles heredados de la Concertación, poniendo énfasis en la desigualdad y exceso de concentración de la propiedad en bancos, AFP e Isapres. Pidió una "comisión antimonopólica que funcione de verdad". ¿Y qué ha hecho Ud. como senador y empresario por esto?, se le repreguntó. "Cuando fui senador de lo que más me preocupé fue de abrir la competencia. Avanzamos mucho, pero hubo un retroceso en los últimos cinco años, y en mi gobierno vamos a recuperar el camino perdido".



Tema cinco: ¿A qué país le darían prioridad como asociado?



Hirsch: "Chile tiene la gran oportunidad de ser vanguardia en la integración latinoamericana. Fortalecer la región es la mejor defensa frente a esta globalización tan asfixiante. El gobierno ha mirado demasiado a Japón y a Asia. Está bien, pero también hay que mirar a América Latina. Segundo, bajar los gastos militares, pues tenemos otra guerra contra la pobreza. Tercero, resolver los problemas con los pueblos originarios". Conminado a mencionar un país concreto, Hisch apunta: "Venezuela… Pero claramente además hay que avanzar más con Argentina, Perú y Bolivia".



Piñera: "Integración con el mundo para lograr mejores empleos y mejores salarios. Con Perú y Bolivia hay una agenda de pasado que divide, pero podemos construir una de futuro con otros temas. Con Argentina, Chile fue muy débil al defender nuestros intereses por el tratado gasífero que Argentina no cumplió. Y con Bolivia, facilidades portuarias e integración económica, pero no cediendo soberanía, pues Chile es respetuoso de los tratados y no hay con ellos problemas limítrofes pendientes desde la firma del tratado de 1904".



Bachelet: "La Comunidad Sudamericana de Naciones. Avanzar en esa línea. En infraestructura, conductos gasíferos, lo vial, túneles y el anillo energético, que va a permitir que todos los países contemos con energía…"¿Cómo exigir a Argentina que cumpla con el pacto del gas?, se le preguntó. "Con Argentina -respondió- tenemos una alianza estratégica que va más allá del tema del gas. Es necesario diversificar las fuentes energéticas, y en ese sentido el anillo cumplirá un rol fundamental".



Lavín: "Tú dijiste, Michele (sin atender a la pregunta formulada), que mi programa lo hacían los grandes empresarios, pero los grandes empresarios están felices con ustedes. Incluso yo diría que les da lo mismo quien gana. Ayer estuve con un jubilado que recibe $38.000 de pensión asistencial… Por eso estoy aquí, por los más pobres y la clase media…" ¿A qué país se le debe dar prioridad como socio?, se le repregunta. "Argentina, por el gas y el desempleo que el tema de la agricultura está provocando en varias regiones del sur".



Tema seis: ¿A qué se aferran en situaciones críticas?



Piñera: "He tenido muchas, y siempre he encontrado ese apoyo en mi familia. Aunque a veces pienso qué hubieran dicho mis padres. Y además, yo soy cristiano. El liderazgo consiste en eso: en tomar decisiones que no siempre son fáciles. Siento que me he preparado toda mi vida para eso, para ser Presidente".



Lavín: "Me aferro a mi familia y a Dios . Más aún, me las voy a jugar por los valores cristianos. Muchos de los problemas de Chile son por ausencia de esos valores: la drogadicción, el embarazo precoz…Conmigo no va a haber aborto. Entiendo lo del condón. Pero yo soy papá de hijas en edad escolar y no quiero que mis hijas anden con un condón en la mochila…"



Hirsch: "A los 15 años quería cambiar Chile, como tantos de ustedes. Nunca se me pasó, como a tantos de ustedes…Un tío me decía: Se te va a pasar. Nunca se me pasó. Cuando veo la cuenca del carbón o la cesantía en San Antonio, eso da sentido a mi vida. Ayudar a otros para que cuando me vaya de este mundo, lo deje un poco mejor. Por eso me uní a la Concertación, y por eso me separé de ella cuando se convirtió en una sociedad anónima…"



Bachelet: "Lo que más importa en mi vida es lo que mi familia y mis padres me entregaron. Una no era solo sino parte de una comunidad. Valores como justicia, honestidad, deber y una audacia, no insensata, pero como para tener un compromiso con las cosas que hay que hacer. Lo otro que me da fuerza es la confianza que la gente ha depositado en mí. No los voy a defraudar".



Tema siete: Problemas del sistema previsional



Un "bonus track" debido a un sobrante de tiempo. La mitad de los chilenos que estén afialiados a AFP no pagaron el último mes su cotización -dice Santa María. ¿Cómo corregir este problema que va a redundar en bajas pensiones?



Lavín: "El sistema requiere perfeccionamientos. Que al trabajador independiente el Estado le pague una parte de su cotización. También las temporeras. Y la jubilación para el ama de casa. Además de los cientos de miles de pensionados del sistema antiguo, que reciben pensiones miserables. Contrapregunta: ¿Si hoy ni siquiera los que trabajan tienen una pensión digna, cómo les vamos a prometer jubilación a las amas de casa? "Pueden tener una jubilación -insistió Lavín-. Que las empresas depositen plata en las cuentas de las amas de casa…"



Bachelet: "Voy a mandar el segundo semestre del próximo año un proyecto con un gran pilar solidario. Segundo, mantener la cotización individual. Tercero, eliminar la discriminación a las mujeres por ser más longevas".



Hirsch: "Los dueños de AFP sólo el año pasado ganaron 112 mil millones de pesos. Pero los cotizantes no ganan. Y las pensiones van a seguir bajando. Lo siento mucho. Este modelo está diseñado para eso…" ¿Propone volver al sistema estatal? "Que los trabajadores administren sus fondos y tengan representantes en el sistema previsional. Y el Estado y los empresarios deben ser aportantes solidarios".



Piñera: "No podemos seguir siendo el país ingrato con los abuelitos y las abuelitas. 38.000 pesos: ¿quién puede vivir con eso? Michelle cree que no es posible dar jubilación a las amas de casa. Pero ellas son un pilar de la sociedad y nadie les reconoce nada. Cuesta 120 millones de dólares. Y el Estado tiene un superávita de 3.000 millones de dólares anuales. Pero también es fundamental bajar los costos de las AFP. Pues por cada peso que el trabajador consigue poner en su cuenta, paga 20 centavos de comisión".



Minuto final y despedida



Después, el minuto final fue usado por todos los candidatos para pasar su «avisito». Hirsch dijo estar convencido de que «podemos construir un país mejor», combinando industrialización y cuidado del medio ambiente. Recordó a Gladys Marín, Salvador Allende y Pablo Neruda, y remarcó que «juntos todos nosotros podemos hacerlo».



Bachelet recalcó que no es una «candidata tradicional, y por he sido muy seria y poco demagógica, sin prometer lo que no puedo cumplir. Tal vez porque soy médico», agregó. «Quisiera representar a los que no tienen voz, ni cuñas en el Parlamento ni en los pasillos del poder. A quienes quieren ser más».



Piñera remató recordando que era «hijo de un funcionario público y de un ama de casa», Dijo que en el 88 estaba convencido de que Chile necesitaba un gran salto hacia la democracia y la libertad (cuando apoyó la opción No), pero ahora piensa que se necesita un salto distinto hacia el desarrollo. «La Concertación -aseguró- no ha sido capaz de resolverlo».



Por último, Lavín puntualizó que hace seis años estuvo a punto de llegar a la Presidencia. «Pero en este lapso el cambio no llegó. El doble de delincuencia, más cesantía…» Explicó que quiere «dar alas a la gente». Y prometió que «no habrá político en Chile que tenga más mano dura contra la delincuencia que yo», para terminar pidiendo la oportunidad de pasar a segunda vuelta junto a Michelle Bachelet y repetir lo que ella misma había dicho antes: «No los voy a defraudar».

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