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Censura contra presidente del Senado crea división en filas oficialistas

El próximo martes 3 de enero los legisladores del PRSD podrían tomar una posición unitaria y definida frente a esta materia, ya que algunos están por apoyar la postura oficialista de censurar a Sergio Romero y otros no la creen oportuna en una época electoral. En todo caso, el comité actuará en forma corporativa, es decir, primará la mayoría. Mientras, el PS y la DC decidieron respaldarla.


El Gobierno realiza diversas e intensas gestiones para alinear las filas concertacionistas en la Cámara Alta con el objeto de que todos los parlamentarios voten a favor de la censura anunciada este lunes por el senador DC Jorge Pizarro en contra del presidente del Senado, Sergio Romero, quien calificó al Presidente, Ricardo Lagos, de "francotirador y guerrillero" al enviar el proyecto de ley que pone fin al sistema binominal y que los diputados de derecha rechazaron.



Las gestiones han estado a cargo de los ministros del Interior y secretario general de la Presidencia, Francisco Vidal y Eduardo Dockendorff, respectivamente, quienes ya tenían antecedentes de que los radicales no estaban muy convencidos de apoyar la censura en contra del militante de RN y miembro del comité político de Sebastián Piñera.



Los cuatro senadores radicales -Guillermo Vásquez, Enrique Silva, Augusto Parra y Nelson Ávila- sostuvieron una serie de conversaciones telefónicas para fijar una posición única al respecto y unirse a lo acordado por los comités de la Democracia Cristiana y el Partido Socialista, que se cuadraron de inmediato con la postura de La Moneda.



Cabe destacar que la censura se aprueba por mayoría simple, es decir, con el voto del 50 más uno de los presentes, y además, en este caso, si se llega a respaldar esta medida sólo se debería ir Romero, ya que la mesa se mantendría intacta.



Radicales divididos



Varios son los motivos por los cuales los radicales no tienen una postura en común muy definida en relación al tema, ya que trascendió que Silva Cimma y Vásquez están a favor de apoyar la censura, mientras Ávila y Parra tienen otra posición.



Ávila, quien es el presidente del comité del PRSD, dijo que "la consulta se hizo después de anunciar la censura". Ello haciendo clara alusión a que los parlamentarios del PRSD fueron contactados después de que el resto de los comités decidieran censurar al senador Romero.



"A cualquiera persona le incomoda que formando parte de un conglomerado no se les consulte en forma previa. La censura puede transformarse en un elemento distractivo respecto del debate sobre los temas fundamentales que debieran dominar la contienda electoral", señaló el parlamentario.



El legislador no quiso precisar, no obstante, el carácter de su voto hasta no conocer la postura oficial de su colectividad. "Yo sigo razonando. No hago predicciones sobre situaciones no configuradas".



Por su parte, el senador Parra expresó que aún no se decide nada y que seguramente se reunirán el próximo martes a analizar el tema, pero de cualquier forma "los radicales actuaremos corporativamente. La censura es vista como una cuestión de los senadores y no va más allá".



Con respecto a las palabras de Romero, las calificó de "imprudentes", a la vez que recordó que el actual presidente del Senado fue electo por unanimidad y "con esto se echa al bolsillo el acuerdo político".



Incluso señaló que la preocupación hoy en día son las elecciones presidenciales y "hay que poner sobre la mesa las diferencias entre Piñera y Michelle Bachelet. Por ejemplo, el futuro del cobre, donde el abanderado de la Alianza es proclive a privatizar y la candidata de la Concertación es contraria".



Parra argumentó que "no creo que el tema de la censura deba opacar la elección presidencial".



"Se salió de madre"



Al justificar su voto de censura para el próximo 4 de enero, el senador Jorge Pizarro (DC) señaló que "en buen chileno, el senador Romero se salió de madre. El presidente de la Cámara Alta lo que debe hacer es garantizar el diálogo, el debate y la discusión al interior del Congreso. No es patrón, ni menos el Senado es un fundo».



El senador criticó que Romero no haya «tenido la hidalguía y la hombría de pedir disculpas y dar explicaciones. Habría sido más cristiano y humanista no descalificar», a la vez que recordó que el titular del Senado llegó a ese cargo por «un acuerdo político entre la Concertación y la derecha al producirse un empate hace unos años atrás, donde la mayoría de los designados lo favorecieron. Fue RN quien lo designó y con mayor razón debiera tener cuidado en representarnos a todos y no a una parte».



Pizarro dijo que «una vez más Romero se saca la careta y se pone la camiseta más dura de la derecha y descalifica el proyecto del fin al binominal que nosotros queremos modificar. Queda establecido que es la derecha más dura de la UDI y de Romero las que mandan al candidato Piñera».



En tanto, el senador socialista José Antonio Viera-Gallo dijo que si la sala se opone a esta censura, los senadores podrían presentarla al Tribunal Constitucional y precisó que «Romero no puede obstruir que el tema se discuta en el Senado y no tiene facultad de veto. Se equivoca cuando señala esto».



Pese a que el Partido Por la Democracia (PPD) tampoco estaba en la conferencia de prensa donde se anunció la moción de censura y no se ha pronunciado oficialmente al respecto, se supo que lo más probable es que se alineen con la postura de apoyar la censura. De hecho, los dos integrantes de su bancada senatorial, Roberto Muñoz Barra y Fernando Flores son muy cercanos al jefe de Estado.





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